Al final mis peores temores se confirmaron y el médico me diagnosticó una rotura de fibras en el hombro. La prescripción era clara, reposo absoluto. Y digo yo, que mejor sitio para reposar que la tranquilidad de la Sierra de Gredos. Tal vez el inconveniente fuera tener que coincidir con unas rutas de Paco, no sé que opinará mi médico. Fue en el 2002 (como apuntó la madre de Paco) cuando estuvimos por última vez en Casavieja. Algunas cosas cambiaron en estos años, se acabó eso de pasar frío en una tienda de campaña, sin agua caliente y en la indigencia total; el paso del tiempo hace mella y decidimos alojarnos en un Hostal, por aquello de soportar mejor aquellas cosas que si que no cambian con el tiempo: las rutas de Paco. Otra de las cosas que no cambiaron en estos años fue el aire acondicionado en la Churrería de Óscar. Para la primera ruta también notamos alguna gotera. Como afloraban en nosotros los recuerdos. Parecía que el tiempo se hubiera parado en el pueblo. Pero dejémonos de sentimentalismo, vamos a las rutas: 1ª Etapa: Sotillo de la Adrada – Casillas – Sotillo de la Adrada. (61 km y 2.100 m de desnivel) Tras el típico desayuno a base de chocolate con churros, ponemos en orden la mecánica debajo de una intensa lluvia. En la foto se ve un claro salto generacional, si la bici habitual de Paco parece anacrónica, hay que ver la que guarda en el pueblo (plato pequeño de 42 dientes incluido). La ruta se inicia siguiendo la antigua caja de un ferrocarril que nunca llegó a circular. Enseguida la dejamos para empezar a ganar altura por pista, entre frondosos bosques de pinos. A Paco le perdemos de vista inmediatamente, nosotros con todo metido y él con el 42-25.... uf, uf, vaya jabonísimo que nos dio. Una vez ganamos altura toca recorrer la ladera al estilo autóctono (como no podía ser de otra manera). Como es lógico, así tampoco éramos a seguirle. Durante la ruta, Paco nos fue acercando a los árboles más venerables de la zona, el primero, el Pino del Aprisquillo. Tras llegar al Collado las Vacas, bajamos a Casillas y comenzamos subida adentrándonos en el valle del Tietar. Los pinos son sustituidos por robles, hayas y castaños. Por momentos el hayedo se vuelve monumental, camino del castañar del Tiemblo. Cada poco, Paco nos saca de la pista para mostrarnos los ejemplares más enigmáticos del bosque. IMPRESIONANTES (También impresionante el abuelo haciendo el chimpancé) De nuevo toca remontar el cordal, en busca del Valle de Iruelas. Una vez arriba, comienza el descenso..... estilo Paco, por supuesto. Como le gusta el Enduro a este hombre. Con la tormenta pisándonos los talones llegamos al último árbol del día, un Tejo centenario que nos serviría de refugio hasta que el chaparrón se alejó lo suficiente. Tras remontar el Valle de Iruelas, comienza el descenso hacia La Adrada, donde finaliza la ruta. Luego más
Más madera!!!!!!! 2ª Etapa: Mombeltrán – Risco del Torozo - Mombeltrán. (45 km y 1.800 m de desnivel) La segunda ruta comienza a los pies del famoso castillo de Mombeltrán. Ante nosotros 1.000 metros de desnivel que salvar para el desayuno, hasta el Cerro de las Campanas. Tras preguntar Fran a Paco el por qué va caminando en zona ciclable, Paco sentencia: “es por haceros un poco de compañía”. Efectivamente, si en esas rampísimas se sube en su 42-25, tardaríamos pocos segundos en perderle de vista. De nuevo se repite la historia, al acercarnos al cordal, bici al yombu y a disfrutar del montanbique. Hubo que poner otra foto, porque en esta ocasión el paseo fue especialmente largo y duro. Eso sí, las vistas merecieron todo el esfuerzo. Tras dejar a un lado el Cerro de las Campanas, ya pudimos ciclar algo, sin perder altura, dirección al Puerto del Pico. El tramo final es una trialera muy exigente, de duras revueltas, donde disfrutar un rato después del porteo anterior (aunque mi hombro no opinaba lo mismo). Después de un bocado y un café en el Puerto, arrancamos pista p´arriba, hacia el Risco del Torozo, 800 m de subida para la sobremesa. La niebla frustra nuestro ataque final al pico, dejándonos a escasos 100 m de desnivel (y ahorrándonos el consiguiente paseo). La suerte fue poder ver un nutrido rebaño de cabra montesa paseando ante nosotros; tras lo cual, optamos por coger la senda que baja de nuevo al Puerto. Toca disfrutar. La senda se convierte en una bonita trialera, donde hay que emplearse a fondo, e incluso rasparse con las rocas autóctonas. Desde el Puerto del Pico parte la Calzada Romana que nos devolverá a Mombeltrán. Son varios kilómetros que llegan a hacerse pesados por el traqueteo. Es uno de esos pocos sitios en los que se le sacaría partido a una doble. A pesar de todo, junto a esas piedras se respira historia..... y algo de sangre. Mañana intentaré subir el resto.
!! como disfruta con la bici al hombro ¡¡ !! que pena que no haya hecho migas con los del torreblanca....:burladia: !! que pinta tienen los sitios .... ¡¡:saltador
¡Como me suenan esas caras ..! Buena gente os juntásteis y buenas rutas os metísteis. Pero sigo sin ver carbón ...
jope , paso de fotos, os marcasteis, yo por ejemplo na solo hice afanes de globeria, como buen globeru q soi
A pesar de las buenas artes de Luís de España con las fotos y las crónicas, es imposible reflejar en digital todo lo que supone para un Asturcon poder disfrutar de esas rutas con Paco y en su terreno (Paco estaría orgulloso de leer esto:risa ). Con más motivo si tenemos en cuenta que todos los que fuimos ya habíamos estado allí. La madre de Paco, mujer encantadora como la que más, tenía apuntado el nombre de los que habiamos ido hace 5 años. Lo conservaba dentro de un vaso de sidra con la Santina que en su día, obviamente despues de utilizarlo, le habiamos dejado como recuerdo. Que sorpresa y emoción cuando nos enseña el papel con nuestros nombres!!! Al margen de los sentimentalismos, las rutas fueron impresionantes...La ruta del segundo día, según mi forma de entender el mountainbike, perfecta: los paisajes, senderos, trialeras, Gredos...., las cabras, la compañia...etc. Y como colofón, esa Calzada Romana es increible. Había zonas que, si obviabas el ruido lejano de los coches, tenían que parecerse mucho a lo que vieron hace 2000 años los romanos, de pensarlo se te ponen los pelos de punta. En cuanto al guía...no hay palabras. Los que le conoceis, imaginaoslo en sus dominios, pues Paco al cuadrado. Al cuadrado tendriamos que elevar nuestros desarrollos para que nos saliese ese 42x25 que utilizaba para las rampas más duras, o al cubo. ¡Sigo sin entender como puede no pinchar con un rueda de carretera! :melopien: Y no penseis que se cortaba en las trialeras o en la Calzada. Único! ¡GRACIAS PACO! :bravo (y el año que viene más!)
3ª Etapa: Sotillo de las Palomas Almendral de la Cañada - Sotillo de las Palomas. (30 km y 650 m de desnivel) La ruta del lunes hubo de acortarse, ya que varios miembros de la expedición debían salvar el matrimonio aquel mismo día. Se optó por repetir parte de una de las rutas de la vez anterior, supongo que a Mario y a Vega les resultará familiar el paisaje. Como el día amaneció con fuerte lluvia, alguno se hizo el dormido para librarse de la mojadura. Con el abuelo roncando, emprendemos camino. La ruta discurre en su mayoría por la cañada real leonesa. En ocasiones la cañada se convierte en un angosto senderito la mar de divertido La mojadura fue considerable, ya que media mañana la pasamos bajo una fuerte lluvia Viendo que ni el tiempo ni el horario acompañaban, hubo que tirar de plano para acortar la ruta. Paco, como buen pastor, se encarga de todo. Al final invadimos alguna que otra propiedad privada y atajamos campo a través para retomar la cañada de nuevo. Es una delicia ciclar a tus anchas por un bosque tan disperso. El último arroyo y a la furgoneta, que la vuelta es larga Aunque antes, que mejor que un poco de sidra para el camino?
Un fin de semana im-presionante, eso si rutas modelo Paco.....algunas veces habia que cambiar la bici por unos bastones de montañero.... El año que viene se vuelve. Gracias a Paco y a su familia por la hospitalidad recibida.
No sé compañero, semejantes experiencias conviene dejarlas reposar una temporada..... no sé, digamos, ¿otros 5 años?
he habaldo con el Abuelo y me dijo que NA que no era para tanto alguna bajadita con piedras y mucha carretera ... dijo que el último día prefirió investigar la ruta de Viriato que hacer 30 kilometrucos con vosotros !! globerossss¡¡
