El pasado mes de julio nueve compañeros del Club En Ruta de Cuenca hicimos una incursión de 3 días por el corazón del Alto Tajo (el Tajo que se salvó). El viernes 22 de julio, por la tarde, partimos desde El Tobar hacia las Torcas de Lagunaseca, recientemente declarado monumento natural. Tras pasar la localidad de Masegosa, nos lanzamos en busca del nacimiento del Guadiela atravesando un magnífico pinar. Después nos dirigimos a Belvalle por un inédito tormagal similar a la Ciudad Encantada. Disfrutamos de las verdes praderas de la finca avistando manadas de ciervos, con algún susto incluido por la presencia de ganado bravo. El descenso hasta el Puente de Martinete es emocionante y en su último tramo relajante. A la Laguna de Taravilla llegamos anocheciendo y vadeamos el Tajo para llegar a Sieteleguas, junto al Salto de Poveda, por una senda entre bujes. La luz de los focos fue providencial. El sábado continuamos junto al Tajo por la magnífica pista que desciende junto a él a lo largo de 35 kilómetros. No desaprovechamos las paradisíacas zonas de baño que encontrábamos hasta el Puente de San Pedro, donde hicimos un alto para comer un bocadillo y darnos un baño antes de iniciar la subida a Villar de Cobeta. Ya en Buenafuente del Sistal, pudimos comprobar la espiritualidad del lugar y, por la senda del viacrucis del monasterio, iniciamos el largo descenso hacia el Tajo para cruzarlo por el vado de La Bujadilla, donde unos pescadores nos aseguran que conocen bien la zona y que es imposible subir a Zaorejas por el portillo que teníamos marcado en el rutómetro. Ni los corzos suben por ahí, nos dijeron. Esto nos siembra de dudas e incertidumbre y nos obliga a estudiar bien los mapas y a encontrar un paso entre los farallones rocosos o nos veríamos obligados a retroceder el camino andado. Creamos varios frentes de búsqueda hasta que uno de nosotros encuentra una escondida senda que sube abriéndose paso entre la espesa vegetación de boj y pinos por un barranco. El avance es lento y la pendiente cada vez mayor. El barranco se bifurca y la intuición del presi nos hace llegar al paso entre las rocas. Suspiramos de alivio. Hemos conseguido pasar la gran barrera de piedra y continuamos ascendiendo, dejando el Tajo en la profundidad del valle, hacia unas parideras desde donde partía un camino que nos acercaría a Zaorejas. Por fin llegamos a este punto crucial y el camino existe, es real a pesar de la insistencia de los pescadores en que no había absolutamente nada. Las vistas son espectaculares y el esfuerzo de la ascensión ha hecho mucha mella en el grupo. Nos espera una reparadora cena en Zaorejas. Comemos como cosacos y después de un paseo por el pueblo y tras preparar la ruta del día siguiente, nos vence el sueño. Domingo, tercera y útima jornada de travesía, regresamos a El Tobar disfrutando de un relajante recorrido que nos lleva a Huertapelayo por carretera en un descenso largo y refrescante. La subida a Armallones por camino vuelve a recordarnos la dureza del parque del Alto Tajo y por fin llegamos a Villanueva de Alcorón. Nos acercamos a visitar su famosa sima en cuyo fondo fluyen gélidas aguas donde saciamos nuestra sed. Llegamos a Valsalobre atravesando antiguos campos de aviación de la guerra civil y, por último, Beteta y El Tobar en cuya laguna nos damos el último baño de la travesía, después de 180 kilómetros por el Parque Natural, que, afortunadamente, no se ha visto afectado por el incendio. Tras una copiosa comida en el restaurante de este pequeño pueblo, regresamos a Cuenca con el deseo de volver al Alto Tajo en una nueva incursión. Será en 2.006 y por la zona de Checa y Orea. Más cercana tenemos la travesía de la berrea del ciervo donde seremos testigos del cortejo y acoso de los machos en nuestra sierra. Mientras tanto seguiremos con nuestras escapadas dominicales para disfrutar de lo que más nos gusta, la bicicleta de montaña.
:alabando :alabando :alabando :alabando :alabando :alabando Un dia de stos me tengo que animar y acercarme a cuenca a montar con vosotros. !!vaya rutas!!!!
Precioso el reportaje, da gusto ver agua y zonas verdes aun en este año de sequía e incendios, enhorabuena
Dios mio que recuerdos!!! Estuve hace muchos años en una ruta por alli de 2 dias. Salimos de Peralejo de las truchas direccion la laguna de Taravilla.... y no recuerdo hasta donde llegamos, que hicimos noche ynos volvimos. Despues de este maravilloso reportaje que ganas de volver a hacerlo!!!! Enhorabuena
Gracias amigos de cuenca. Se agradece ver fotos tan guapas de vez en cuando. Tengo ganas de volver por la zona.
¡Qué preciosidad de lugares! Realmente siento "envidia" (de buen rollo) cuando veo los sitios tan chulos por los que pasais Saludos!