He terminado la restauración de mi Orbea Moncayo, es una restauración parcial, solo he sustituido lo que realmente estaba muy deteriorado que a sido las ruedas, los pedales, las camisas y cables de los frenos y de los cambios, la cinta del manillar y los zapatas, la tija y el sillín, todo lo demás es original. He mantenido incluso las bielas que tienen puntos de oxido, al igual que el cuadro, no quiero desprender a la bicicleta de todos los años que a visto pasar. A sido la primera vez que me aventuro en una empresa de este tipo y e de decir que hubo momentos duros, como el sacar la tija original o colocar el manillar en su posición, que después de 30 años estaban prácticamente soldadas al cuadro, ahora finalizada a merecido la pena el esfuerzo y la inversión.
Muy guapa! Mi padre tenía una igual hace unos 30 años. A saber qué fue de ella... Enviado desde mi SM-A510F mediante Tapatalk