Siguiendo la estela de ACG & RE-ENGANCHADOS

Bueno como hicieron hace poco este grupo del foro, lo hemos hecho 3 bikers de torrent-Valencia. Hicimos el camino de santiago la segunda quincena de agosto en 11 dias por el camino frances y todo por monte.
Hicimos una media de 70 kms diarios menos la penultima etapa que en galicia juntamos 2 etapas seguidas.
Bueno en breve colgare unas cronicas que hemos y hecho y fotos.

Un saludo de Iván, Raquel y Jorge.

 

Espero que hayáis disfrutado tanto como nosotros :wink:

 

Venga esas fotos que a Nano se le han acabado las suyas.

 

Todavia queda el video :mrgreen:

 

Aqui van las cronicas de las etapas estan escritas por Jorge. En unos dias las fotos.

Nuestro viaje no comienza el 15 de agosto, sino unos meses antes, con los entrenamientos especiales para el camino. El que diga que no se necesita respuesta física para realizarlo, no sabe lo que dice.
Al camino hay que ir entrenado, cuanto mejor se valla, mas se disfrutará de él. Vimos a chicas desfallecer, hombres maduros que no habían hecho deporte nunca y que querían hacer 50 kms diarios a pie, (este hombre sin ir mas lejos llevaba 3 días andando y nos decía que le había entrado una pájara en la pierna). Hay que ser consecuente con lo que se va a realizar y en que estado físico te encuentras, informarse bien en que lío te metes y entrenar con tú equipo, no dejar nada a la suerte, solo la meteorología.

Nuestro entrenamiento consistió en un kilometraje diario de 35 km, por montaña, sin peso durante el primer mes; para proseguir el segundo mes, realizando el mismo recorrido, pero con todo el equipaje. Para terminar dos semanas antes del viaje sin peso. Los fines de semana incrementábamos el kilometraje, incluso llegamos a subir puertos con todo el equipo (12 kg de media), como el de la Bellida cerca de Alcublas.
Me tocó pelear mucho con Raquel e Iván, para concienciarles de que si tenían claro donde se metían. Mí idea era realizar un grupo compacto, tanto físico como moral, y creo que se consiguió.

Los miedos surgieron, acercándose la fecha; Raquel se resentía de las rodillas (una posible tendinitis), pero pudo recuperarse y realizar el camino sin mayor problema.

La media diaria en el camino fue de 70 kms diarios, y los conseguimos realizar sin ningún contratiempo. Físicamente se respondió muy bien; también es cierto que las primera etapas fueron duras, como las últimas. También debo señalar que en todo el camino la gente te lo pone muy negro, tanto en dureza como peligroso e intransitable. Nada mas lejos de la realidad, el camino se puede realizar al 100 % por camino, el mismo que utilizan los andarines. Siempre te dicen lo difícil que es, y os puedo asegurar que he estado en sitios peores. La dureza es media, bien entrenado, es muy fácil, el reto puede estar en levantarse todos los días y pedalear durante 5, 6 u 8 horas seguidas.

Otra cosa que me llamó mucho la atención, es la cantidad de personas que realizan el camino a Santiago en bici por carretera. No tengo nada que decir sobre tal opción, cada cual es libre, pero lo cierto es que estas personas están realizando un viaje totalmente distinto, aunque la meta sea la misma. Cuando estábamos desmontando la bici en el aeropuerto de Lavacolla, se nos acercó un ciclista que había terminado ese mismo día su peregrinación, y nos preguntó sobre el embalaje, precio, etc. Y cuando todas sus dudas estaban aclaradas empezaron las preguntas del viaje, que cuanto habíamos invertido en el viaje y de donde habíamos salido, le contestamos que once días y que habíamos salido desde de Sant Jean de Pied. Le pareció mucho, ya que él había tardado tan solo ocho días, haciendo un alto kilometraje diario. Mí contestación fue una afirmación, tú seguro que lo has hecho por carretera. Y efectivamente, así era, la limpieza de su bici le delataba. No le quedó más remedio que recapacitar de sus comentarios.
Es cierto que lo podíamos haber realizado en menos tiempo, pero para qué, si lo que consiste esto es en disfrutarlo.

Las etapas se escogieron dé tal forma que pudiésemos dormir en campings privados para no tener problemas de hospedaje, y en los lugares que no habían, no nos quedaba mas remedio que dormir en hostal. La verdad es que no te gastas mucho más dinero y las bicis están mucho mejor protegidas. El único inconveniente es el de llevar peso extra en el portaequipaje, la tienda (especial de una persona y poco peso), saco y esterilla.

Empezamos haciendo pocos kilómetros, para terminar apretando en Galicia, totalmente al revés de la demás gente. Las etapas nos salieron así, no hay mas explicación.

Una de las mejores experiencias es la de conocer gente. Me gustaría saludar a Javier de Barcelona, un peregrino con su Specialized y su BOB TRAILER, que además de ilustrarnos sobre el camino en BTT, (que no es fácil de encontrar, y Javier nos dio un montón de información válida), pudimos disfrutar de su compañía toda una jornada.
También a Rubén de Madrid, que nos equivocamos de opción y nos fuimos por la vía Trajana.
Y a Andrés, Julio, Paco y su novia, de Fuen Labrada, que nos encontrábamos y nos despedíamos continuamente.
Y a nuestros amigos del camino del norte, Hector, una maravilla de chaval, Lola de Madrid, Iker de Barcelona, el Italiano de Nápoles, que cogía el autobús cuando se cansaba, los irlandeses, los franceses. Con ellos cenamos la última noche en Santiago, donde unos se despedían para irse a sus lugares de procedencia y otros como Hector, Lola, Iker y el italiano se marcharon al día siguiente para proseguir su periplo hasta Finisterre.
Toda gente estupenda.

Si empiezo ha hablar del equipo utilizado os diré que la mejor opción para realizar cicloturismo de montaña es el BOB TRAILER, que lo llevó Iván. Yo tenía mis dudas, pero en la primera etapa se disiparon. El carrito fue una de las mayores atracciones de todo el camino. Su presencia despertaba la admiración en algunas personas, y en otras desconfianza. Pero todas preguntaban.
Es el mejor invento que hay por el momento para transportar equipaje, llevaría unos 15 kilos, y en ningún momento se quejo de él. Sin embargo las alforjas son un coñazo, notas mucho el peso, sobre todo cuando te toca bajarte de la bici y arrastrarla.
De todos modos las alforjas, unas Mas Ferrer económicas, aguantaron todo el camino, y os puedo asegurar que les metí caña, también es cierto que se las vi a mucha gente. (indica que dan resultado). Las recámaras utilizadas fueron unas Slime, no tuvimos ni un solo pinchazo, y las ruedas unas MAXXI MOFO 1.95, excepcionales.
Que no se me olvide que todos llevábamos funda de gel para el sillín.

Antes de realizar el camino intenté ilustrarme lo mejor posible sobre el viaje. Me compré libros, visité páginas de internet, pregunté a amigos que ya habían realizado el camino (en este caso era un compañero de la peña que lo había realizado dos veces, pero sin peso y con coche de apoyo, distinto a lo que íbamos a hacer nosotros, lo nuestro era algo mas aventurero).
Uno de los mejores relatos sobre el camino lo encontré en una web de www.amigosdelciclismo.com, además de ser una página sobre el camino en bici todo terreno muy completa.
También me metí en una página llamada www.caminodesantiago.com, que tiene un foro del peregrino. Una porquería, no saqué nada en claro. No sé para que utilizan el foro esta gente. La última vez que entré, había un tipo que invitaba a los peregrinos andarines a echar clavos en las curvas, para que los peregrinos ciclistas pinchasen. Sin comentarios.
Había un forero que preguntó que si los pedales automáticos eran lo adecuado, y l e contestaron que se los quitase. Una tontería, nosotros hemos llevado el equipo normal del ciclista (del ciclista de montaña), incluso el camel back (imprescindible), y no nos ha molestado nada, aun diría mas, cuanto más específico y de calidad sea el equipo empleado, menos problemas te dará. Esto es como me dijo Rubén, estamos en un país de médicos y abogados, me quería decir que todo el mundo entiende de todo, y que se permiten dar consejos, aún sin tener ni idea.

En el camino te gastas dinero, no es un viaje extremadamente caro, pero los 500 euros o más no te los quita nadie. Lo mas caro es el transporte de personas y mercancías (en este caso la bici). Recuerdo a un biker de Xátiva, que para volverse tenía que pagar un vagón completo de RENFE para transportar su bici, esto le costaba 120 euros, y solo le llevaba hasta Madrid, después tenía pensado alquilar un coche. Un alemán que llevaba ya 2000 km en sus piernas, nos dijo que parecía mentira que en el país de los ciclistas, no se pusiesen las cosas más fáciles, ya que en Alemania no había ningún problema con estas cosas.
Bueno, pues nosotros al ser tres decidimos alquilar una peugeot 806, llegar hasta Pamplona y devolverla, y la vuelta en IBERIA, ya que nos hacía un descuento del 50% sobre la tarifa por ser peregrinos. La bici iba gratis, aunque nosotros pagamos un suplemento para que las tratasen bien; ese suplemento no sirve para nada, las tratan a golpes.
Creo que ya es suficiente con la introducción, ahora viene la crónica por etapas del camino.

Domingo 14 de agosto de 2005
Roncesvalles - Saint-Jean Pied de Port – Rocesvalles 63 km

Esta etapa la hicimos sin peso, ya que estábamos en un camping de los pirineos, y el coche no lo podíamos devolver hasta el día siguiente. Así que nuestra primera etapa fue de acercamiento al camino. El tiempo fue soleado. Salimos por carretera desde Roncesvalles hasta Saint Jean Pied de Port.
Nada mas pasar el alto de la Ibañeta, empezó la bajada por carretera, unos 22 kms. Muy bonito, y sin apenas cansarnos. En menos de una hora estábamos en el pueblo francés. Pero antes decidimos almorzar en la mitad del recorrido, en Valcarlos, y tomarnos un café, no todo tenía que ser sacrificio, y además, no teníamos ninguna prisa, así que a disfrutar de las vacaciones.
Cuando llegamos a Saint Jean, estaban en fiestas, y parecía mas un pueblo navarro que francés, te dabas cuenta que no estabas en España por los letreros publicitarios.
Así que nuestro primer paso en tierras francesas era el de buscar la oficina del peregrino para sellar y preguntar por el camino de tierra que nos debía devolver a nuestra patria.

Después de preguntar en un albergue y entendernos por señas, nos indicaron donde estaba la oficina del peregrino. Una vez en la cola, por que había cola, para sellar, entablamos conversación con una familia de Massanassa, familia compuesta por abuelo, abuela, tres hijos gorditos, mujer, marido, cuñada y cuñado, todos para sellar y ocupar un albergue. Yo no sé si esta gente haría el camino, pero un poco sospechoso si que era.

Al fin nos tocó el turno, nos despachó una señora alemana que no hablaba el español, pero era muy ¨ avispada ¨ , y nos entendió a la perfección. Nos selló y nos dio una hoja donde se indicaban todos los mecánicos de bicicletas del camino.
Al ver que no me daban mas cosas, porque yo había visto por ahí un planito muy chulo del pueblo, se lo pedí, ya que queríamos volver por la ruta de Cize. Esta mujer me dijo que no, que en bici por Valcarlos, y yo le contesté que sí, que nos íbamos por Valcarlos, pero que aún así, me lo indicase. Se quedó con cara de perpleja y me lo indicó sin demasiadas ganas.
Había que coger la Rue de Espagne, Rue que habían borrado con spray los franceses, o quizá algún español.
Después de probar el chocolat de Bayone, que era muy rico pero también muy caro, nos dispusimos a realizar el camino de vuelta.

La ruta tiene mucho desnivel, zonas técnicas, como cualquier ruta de montaña normal, pero en esta vas por lo pirineos. Espectacular y gratificante, majestuosos paisajes pirenaicos y frondosos bosques caducifolios se suceden en el recorrido; esto lo he sacado de la mini guía que llevábamos, ¿a qué queda bien?.
Al final realizamos unos 63 kms, y terminamos en Roncesvalles comiéndonos un bocata. Aquí también sellamos, la chica nos preguntó que de donde éramos y de donde veníamos. Contestándole que de Valencia y que habíamos hecho 63 km, primero por Valcarlos y después por la ruta de los puertos de Cize. Solo le faltó santiguarse. Era llamativo como la gente se sorprendía.

La anécdota del día fue con Iván. El tío iba de rally por los Pirineos, y al finalizar la etapa te bifurcan, diciéndote que es preferible, si vas en bici bajar por camino rural. Pues aquí el xiquet, se bajó la zona técnica a toda leche. El tío se lo baja y acaba en Roncesvalles, y pasa una señora y le pregunta, ¨ buenas tarde, ¿este que pueblo es?.¨(se había desorientado totalmente), contestándole, ¨Roncesvalles¨. Y otra señora al verlo, le pregunta ¨¿vas a hacer el camino?..¨, contestándole Iván, ¨ Sí en once días ¨, y la señora le suelta, ¨ me parece a mí que tú no vas a hacer el camino .¨

En esta etapa vimos a un montón de bikers haciendo rutas por la zona, estuvimos hablando con unos alemanes que ya lo habían realizado y nos dieron ánimos para proseguir.
Tan solo nos quedaban 765 kms.


Lunes 15 de agosto de 2005
Pamplona – Estella 61 km

El lunes nos levantamos pronto del camping, para llegar a Pamplona a buena hora y devolver el coche, por lo cual, la etapa de Roncesvalles – Pamplona, no la realizamos.

Devolvimos el coche en el aeropuerto de Noain, montamos las bicis y preparamos el equipaje. Nos íbamos a Santiago.

Nada mas salir de Pamplona volvimos a sellar y nos encontramos con la primera gran prueba, el alto del perdón, una de las subidas míticas del camino, incluso había una furgoneta de avituallamiento en lo alto para socorrer al peregrino. Es una subida técnica y con un considerable desnivel, el único problema era el peso, que te tiraba para atrás y te otorgaba una considerable torpeza. Después vino la bajada, Iván la bajó sin ningún contratiempo, y yo al querer seguirlo me saltó una alforja. A partir de ese momento empecé a utilizar bridas para asegurar el equipaje. Raquel también bajó, pero más despacio, y unas señoras que estaban en lo alto no hacían mas que preocuparse por ella. Le decían,
¨ cuidado, te vas a caer ¨.

Una vez superada la primera parte, en la que se sudó un poco, venía realmente lo complicado, llegamos a plantearnos en dejar peso, ya que si las siguientes etapas eran como esta no podríamos aguantarlo. La cuestión era que al realizar la autovía del norte, habían hecho un itinerario diferente, camino secundario que atravesaba y seguía a la autovía durante el resto de la etapa. Era una sucesión de subidas y bajadas técnicas, donde tuvimos que bajarnos muchas veces y arrastrar de la bicicleta. Los riñones fueron los que se resintieron. En esta etapa pasamos por una antigua calzada romana.

Subiendo el alto del perdón vimos a dos andarines, que la casualidad hizo que comiésemos juntos en un restaurante de Uterga. Estos dos chavales eran de Valencia, y se les veía con buena preparación física. Hicimos amistad, y nos contaron que tenían pensado emplear unos 24 días. Estos iban fuertes. También nos dijeron que les parecía duro todo lo que habían hecho hasta ese momento.

Una vez comidos y descansados, proseguimos hasta Estella, donde acampamos en el camping. Cenamos espaguetis y a dormir.

Martes 16 de agosto de 2005
Estella-Logroño 54 km

A las 6 de la mañana nos levantamos, teníamos que desayunar, recoger y montar el equipo en las bicicletas. Os puedo asegurar que después de 11 días esto lo hacíamos en 45 minutos.
Salimos con ganas del camping, y ya en Estella pasamos por la oficina del peregrino y sellamos. A los pocos kilómetros nos encontramos con la fuente de Irache, unas bodegas donde hay un a fuente que da vino, una gentileza de la bodega. Le metimos un traguillo, para probarlo. Habían un grupo de inglesas que tenían un cacillo preparado, y no hacían mas que reírse. Por lo menos irían contentas ese día.
En esta etapa nos encontramos con Javier, un biker experimentado que nos dio un montón de información sobre el camino, ya que esta era su segunda vez. Tenía pensado una vez llegado a Burgos coger el tren hasta León. Este tramo no le gustó nada el año pasado y además tenía poco tiempo.
Javier iba acompañado de otro biker de Xátiva, llevaba 30 kg de peso, entre las alforjas y una super mochila que llevaba en la espalda. Nos iba diciendo que no podría aguantar mas con ese peso, pero lo sabios consejos de Javier le hicieron que en el siguiente pueblo mandase parte de su equipo por SEUR.
El biker de Xátiva era dueño de un gimnasio, y había que verlo, era un pequeña mole subido en una BH sierra Nevada. A este biciperegrino ya no le volvimos a ver mas, ya que empezó fuerte en las primeras jornadas haciendo muchos kilómetros. Además era de los que cogía carretera.

Poco antes de llegar a Logroño, nos encontramos con Felisa, la de los higos, agua y amor. Esta señora era la que nos sellaba antes de entrar en la población.

Al fin Logroño. En esta ciudad teníamos un hostal reservado, La Bilbaína. El dueño al vernos vestidicos de bikers, le empezó a dar una risita histérica. El dueño era gay y no hacía mas que observarnos. Ese día durmió contento.
La verdad que el hostal estaba muy bien, era una casa antigua en el mismo centro de Logroño. Aquí nos lo pasamos muy bien, ya que teníamos todos los bares de tapas nada mas bajar del hostal
Comimos en el bar la Redonda, donde nos invitaron a unas cervezas, me imagino que por ser peregrinos. En la terraza del bar nos deilitaba con su música La Sombra Azul, así sé autodenominaba el músico de marras, un tipo que dejaba tocar solo su organillo

Comiendo volvimos a ver a Javier, donde se sentó con nosotros para entablar una conversación.
Había hecho la transpirenaica, y nos decía que eso si que era duro, que no tenía nada que ver con esto, debido a los grandes desniveles y poca humanización de la zona.
Terminamos de comer y se despidió, ya que se iba a dormir al albergue.

Miércoles 17 15 de agosto de 2005
Logoño – Santo domingo de la Calzada 60 km

Esta fue una ruta sencilla, jalonada de diversos pueblos y ciudades como Nájera.
En Nájera entablamos una conversación con un señor que al final era el abuelo de Carlos Coloma, campeón de España de BTT, que cuando se enteró Iván le infló a preguntas.

El paisaje es de secano, lleno de campos de vid y cereales, muy parecido a lo que nos híbamos a encontrar.

Aquí comimos con Javier, que nos lo volvimos a encontrar, y estuvimos hablando de nuestras vidas, que qué hacíamos, etc. Javier estaba en el mundo de la publicidad, como cámara. Le dimos nuestras direcciones de correo y nos despedimos.

Si mantenemos el contacto, seguro que le propongo hacer el camino del norte en mountain bike., pero esto dentro de unos años.

Se me olvidaba que en algún pueblo de los que pasamos nos encontramos con un grupo de bikers madrileños, que salían desde Logroño. Coincidimos almorzando en una tienda de ultramarinos. Les dimos el teléfono del aeropuerto de Santiago, ya que no sabían aún como volver a Madrid. Después me enteraría que tenían el vuelo un día después que nosotros.

Jueves 18 de agosto de 2005
Santo Domingo de la Calzada – Burgos 80 km

En Belorado nos salió el hospitalero, un italiano tomándose un café, para preguntarnos sobre el carrito de Iván. Nosotros le dijimos que iba de categoría, que era lo mejor, y aún así no se lo creía. Le dijimos que la subida al alto del Perdón y su bajada lo hizo sin pestañear, y aún así era escéptico ante semejante invento. Nos previno sobre el alto de la Pedraja, y nosotros, con la experiencia acumulada de varios días, le contestamos que hasta que no estuviésemos allí no podíamos opinar.

Cuando subimos el alto de la Pedraja nos dieron ganas de bajarlo para explicárselo al hospitalero, que no era para tanto, que tenía su dificultad, pero que no era lo complicado que nos había explicado. Estoy seguro que con lluvia se complica mucho, pero ese no era el caso. La subida tenía un tramo técnico, pero de tan solo 100 metros, el resto iba en subida, pero con pista buena. A Raquel le costó un poco subirla, pero al fin al cabo iba lo suficiente entrenada para coronarlo sin muchos problemas.
El resto hasta Burgos no entrañaba ninguna dificultad.

Esa noche dormimos en la ciudad monumental de Burgos, sellamos, ya que habrían a las 10 de la mañana el albergue, y nosotros teníamos que madrugar.

Viernes19 de agosto de 2005
Burgos – Carrión de lo Condes 90 km

Comenzamos a pedalear a las 6 de la mañana.
Estando en la catedral, de noche y con poca luz, empezamos a oír por sus callejuelas a un tío haciendo pases de toreo. Me giré y vi a dos personas con aspecto sospechoso, por lo que decidimos salir pitando, por sí las moscas.

A partir de esta etapa nos sumergimos en un mar de campos de cereal, entramos en Tierra de Campos, 200 km de rectas, calor y viento. Los peregrinos andarines le llaman las etapas de la meditación. La verdad que a mí, personalmente, me gustó, es algo que hay que experimentar. Sobre todo cuando dejas atrás el campo cultivado y comienzas a entrar en el Bierzo Leones, hay un cambio drástico de paisaje.

En esta etapa destacaría el tramo que nos acompañó el Canal de Castilla, canal navegable construido en el s.XVIII para dar salida a las mercancías de los pueblos castellanos por los puertos del norte y convertir los secos campos de cereal en tierras de regadío. Con la llegada del ferrocarril en el s.XIX, hizo arruinar la industria creada por el canal , y hasta 1960 estuvo en funcionamiento. Hoy en día se usa exclusivamente para regadío, y últimamente se le está dando un impulso turístico.

También pasamos por Frómista, que además de hacer uno de los mejores quesos de oveja del mundo, también tiene la iglesia de San Martín (s.XI), monumento nacional, y que en cualquier enciclopedia que se precie de historia del arte, aparece como un ejemplo del estilo románico.

Al fin llegamos a Carrión de los Condes, donde la mala fortuna hizo que coincidiésemos con las fiestas patronales. Cuando acabó de tocar la última nota la orquesta de la verbena, eran las cinco de la mañana y nos tocaba el despertador. Imaginaros la siesta que nos pegamos al día siguiente.

Sábado 20 de agosto de 2005
Carrión de los Condes – Masillas de Mulas 79 km

Salimos de noche, después de una noche casi sin dormir. Dio la casualidad que el tiempo empezaba a cambiar y tuvimos la noche mas fría del todo el verano, 6º C.
Así que aguantamos como pudimos durante 16 km entre páramos y tinieblas, ya que amanecía a las 6:30. Los peregrinos nos decían: ánimo que la mañana es estupenda, que vais acompañados por la luna; que era llena y podíamos ver muy bien camino.

Cuando ya no aguantábamos más el frío, apareció de la nada el primer pueblo, y en la esquina un bar, pues nada a desayunar como Dios manda. Café con leche y tostadas, con mantequilla y mermelada. El pueblo, palentino, se llamaba Calzadilla de la Cueza, y el camarero muy simpático nos daba conversación de cualquier tipo, incluso hablamos del trasvase Ebro-Jucar.

El siguiente pueblo en detenernos fue Sahagún, donde hicimos una parada para almorzar. En este pueblo nos encontramos a Rubén, que venía con dos chicos mas, pero al querer quedarse estos y nosotros continuar, decidió venirse con nosotros.

Con él nos equivocamos en una bifurcación; nos dirigimos a León por la vía Trajana, una antigua calzada romana. La verdad que estuvo bien, una gran recta con muy pocos peregrinos al alcance de nuestra vista.

En este tramo nos contó parte de su vida. Venía con cuatro amigos, y entre ellos venía una chica que no pudo aguantar el tirón, por lo que ella y su novio, por soliraridad, siguieron el viaje en coche. El tercer amigo parece ser que sufría una tendidítis.
Rubén es Alpinista, y venía de los Pirineos, creo que de Aragón, una vez colgadas las botas decidió realizar el Camino.
En Mansilla de Mulas nos despedimos, nos dimos el correo electrónico y ya no le volvimos ver por el camino. Espero tener contacto con él y sacar cosas positivas.

El camping de lujo, tranquilo, limpio y al lado de las tranquilizadoras aguas del río Esla, lo justo para descansar de la noche anterior.

Domingo 21 de agosto de 2005
Mansilla de Mulas – Hospital de Órbigo 58 km

Hoy nos levantamos a las 6:45, ya era hora que un día nos levantásemos mas tarde. De todos modos estamos llegando de forma habitual a los destinos diarios sobre las dos de la tarde, justo para comer.

El camino sigue siendo llano, sin ningún cambio aparente, y solo te saca de la monotonía la entrada a un pueblo o ciudad.

Al fin León, una de las ciudades mas hermosas que he visitado, su Catedral, casco viejo; es para verlo. La crítica está en que es la ciudad peor señalizada de todo el camino, nos costó muchísimo salir de la ciudad y encontrar el camino.
Al ver a un grupo de ciclistas de montaña que más o menos que se orientaban, decidimos seguirles. La cuestión es que si no nos damos cuenta nos meten por autovía, que además de ser muy peligrosa, carriles de aceleración, etc, está completamente prohibido.
Uno de ellos nos dijo que le siguiésemos, ya que el camino, según su mapa, estaba en muy mal estado y no se podría circular con el peso que llevábamos. Le contestamos que no, que preferíamos el peor camino de tierra que pasar por allí. Así que el hombre continuó.
La cuestión es que al final encontramos las señales que nos hacían continuar por tierra, y os aseguro que era facilísimo esa parte del trayecto; pista con buen firme, así que enfilamos directamente hacia Hospital de Órbigo.
Cuando llegamos al pueblo, y cruzamos el puente del paso honroso, ya os contaré otro día su historia, nos paró un hombre que nos contó su peripecia del año pasado. Había conseguido realizar desde su pueblo hasta Santiago, unos 270 kms, en dos días. Por carretera evidentemente.
Ya llevaríamos unos 30 minutos de conversación, cuando por el puente pasaron los ciclistas de la autovía. Se nos quedaron mirando. Me imagino que lo pasarían mal por la carretera y hubiesen preferido venirse con nosotros.

Lunes 22 de agosto de 2005
Astorga- Ponferrada 67 km

Nos espera una etapa bonita, comenzar a adentrarnos en el bierzo leones y subir a la Cruz de Ferro.

Este día nos levantamos a las 5:30 de la mañana, y también hacía frío, fue la primera vez que vi flojear a Iván por el frio, ya que no estamos acostumbrados a ese clima.. Tirado por la montaña quejándose. No íbamos muy preparados para esas temperaturas.

Nada mas pasar Astorga y después de desayunar por segunda vez, llegamos a Rabanal del Camino y empezamos la ascensión a la Cruz. Aquí volvemos a ver a nuestros amigos de Fuen Labrada que estaban reponiendo fuerzas en un bar del pueblo.
La ascensión y bajada la hicimos en su totalidad por monte, no siendo esto lo normal, ya que hay una carretera paralela a la senda, y es muy fácil caer en la tentación
Una vez alcanzada la cima, hacer la foto a la cruz y tirar una piedra al montículo, dio comienzo la bajada. Bajada adredanílica, ya estábamos acostumbrados la peso y no nos cortábamos en bajar fuerte.

Una vez sobrepasado este punto nos encontramos con la casa de Manjarín, un albergue de montaña, en donde el hospitalero en días de niebla tañe su campana para orientar a los peregrinos. Iván quiso visitar la casa y hacerse una foto, ya que la vio en las crónicas de Nanotrón.

Martes 23 de agosto de 2005
Ponferrada – O Cebreiro 60 km

Una vez en las afueras de Ponferrada nos empezamos a quitar ropa por el calor, y nos volvimos a encontrar con Andrés, Julio y Paco. Nos dejaron un bombín para darle presión a la horquilla de Iván, y nosotros le medio arreglamos la rueda descentrada de Andrés. Aquí nos hicimos una foto y nos despedimos, ya que nosotros empezábamos a alargar las etapas en kilometraje y ellos ya empezaban a estar agotados, por lo que empezaron a disminuir.

Lo más significativo de la etapa fue sin lugar a dudas la ascensión a O Cebreiro, 10 km de subida vertical, alcanzando hasta un 17,5 % de desnivel. La verdad que se sufrió bastante, hacía calor, y había unos bichos voladores que nos picaban y nos hacían sangre, todo una gozada.
La experiencia de la subida fue salvada gracias a la espectacularidad del paisaje, realmente mereció la pena el esfuerzo. Nada mas llegar a la cima teníamos a nuestros pies toda Galicia.

Miércoles 24 de agosto de 2005
O Cebreiro- Palas del Rei 90 km

Nos levantamos a las 5:45 con dolor en las piernas del esfuerzo del día anterior.

Nos adentramos en la provincia de Lugo, por caminos y aldeas rurales con olor a vaca. En una de las casas del lugar compramos frambuesas y arándanos, y las señoras de las aldeas nos intentaban vender queso de tetilla de pura leche. Parecía que estábamos en otros tiempos.

La cuestión es que hasta Sarriá, a unos 40 kms de O Cebreiro, la ruta era facilona, pero una vez pasado este punto, empezaba a complicarse el camino. Una sucesión de subidas y bajadas continuas, una ruta verdaderamente rompepiernas.
El paisaje excepcional, de todo lo visto me quedo sin lugar a dudas con este paisaje.

Así que una vez comidos en un Mercadona de Sarriá, decidimos continuar hasta Palas del Rei a base de barritas energéticas.

Cuando llegamos, lo primero que hicimos al llegar al hostal fue ducharnos, cenar en el bar e irnos a dormir, el cansancio de tantos días ya empezaba a notarse.

Jueves 25 de agosto de 2005
Palas del Rei – Santiago de Compostela 70 km

Comenzamos el día con una fina lluvia pulverizada, como la que echan en los parques de atracciones, pero pronto paró y pudimos proseguir sin el odioso chubasquero.

Antes de salir a pedalear nos cogió por banda el hostelero, un hombre que nos dio muchos consejos sobre la vida, nos tuvo una hora y media de reloj.

Al final pudimos escabullirnos, después de chocarnos las manos dos o tres veces.

La cuestión es que nos íbamos contentos, ya que es día acabábamos, y a la vez una cierta nostalgia, ya que sería el último día de bicicleta.

A las 11 estábamos en Melide, y al pasar por la pulpería Ezequiel, nos dispusimos a comprobar el buen hacer de este pulpero. A mala hora nos paramos, ya que el vino blanco estaba fresquito, y nos bebimos toda la jarra. Iván y yo lo pagamos, el mal estar que teníamos es indescriptible, no teníamos fuerzas para proseguir, por lo decidimos descansar un rato.

Una vez recuperados de los efluvios del alcohol, nos dispusimos a continuar.

A las cuatro de la tarde se nos puso a llover en serio, y fue un revulsivo para terminar la etapa, ya que el aburrimiento y desgana estaba haciendo mella entre nosotros. La verdad es que empezamos disfrutar de Galicia. Sus bosques de helecho y eucaliptus impregnaban de su olor todo el ambiente. El bosque gallego es un bosque frondoso y salvaje, y es cuando comprendes todas sus leyendas.

Esta etapa se nos hizo la mas dura, tanto físicamente como sicológicamente, no veíamos la ahora de llegada, posiblemente por el cansancio acumulado.

En Arzua me pareció ver a nuestro amigo Hector, amigo de nuestro pueblo. Sabíamos que estaba realizando el camino del norte, y que iba a llegar el mismo día que nosotros a Santiago. La cuestión es que ni Raquel ni Iván le reconocieron, y seguramente por el cansancio y el frío no quisimos cerciorarnos de que era él. Mas tarde, ya en Santiago, hablado con él, me confirmó que estaba resguardándose de la lluvia. Hubiese sido bonito habernos encontrado en esas circunstancias.

Por fin monte de O Gozo, a tres km de Santiago. El lugar es una sucesión de barracones, que la impresión que da es la de un campo de refugiados, no me hubiese gustado quedarme a dormir en ese lugar.

Aquí paramos a sellar e informarnos del camping de la ciudad.
Unan vez en Santiago, decidimos comprar en una ferretería dos plásticos para guarecernos de la lluvia. Y por fin el camping, ducha reparadora, cena de menú y a dormir.


Viernes 26 de agosto de 2005
Santiago de Compostela

Salió un día soleado y nos dirigimos por la mañana a por nuestra compostela, que nos la habíamos ganado merecidamente.

Hicimos las fotos pertinentes en la plaza del Obradoiro, para proseguir hasta la oficina del peregrino, donde nos sellarían por última vez y nos darían la ansiada compostela, que además de tener un valor emocional también lo tenía económico, ya que era el documento que nos iba permitir volver a Valencia mas barato.

Una vez en nuestro poder, nos fuimos a recorrer Santiago de Compostela, una ciudad tranquila de tan solo cien mil habitantes, que recobra su vida en octubre, cuando los universitarios vuelven para comenzar sus estudios.

Aquí acaba nuestro viaje. Ahora tan solo quedan los recuerdos y las fotos, y sobre todo las amistades realizadas durante el camino.
El camino de Santiago es uno de los mejores viajes cicloturistas que se pueden realizar hoy por hoy en Europa. Si se está un poco abierto a la gente y se tiene un poco de inquietud cultural, en el camino te lo puedes pasar muy bien y vivir experiencias inolvidables.

 

Bueno perdonad si me excedio metiendolo todo en un mensaje pero no tengo mucha practica en estas cosas.
Decirme que os parece nuestra aventura.

 

Jejeje, tendrás que esperar unos días, hasta que acabemos de leer la crónica... :roll:

 

jajajjajajaja ivan ya la has cagado como siempre jajajajjajajjaa ke tioooo llinares haver sis abes kien soy,

 

Una pregunta que os ha parecido el haber utilizado un BOB TRAILER para el camino de santiago? hecho en su totalidad por tierra.

 

Bueno, pues ya están aquí las fotos. Se han hecho de esperar.


Esta primera foto son de los entrenamientos específicos para el camino.

Las siguientes son de los Pirineos y la última en el Alto del Perdón.

Espero que os gusten.

 

Seguimos con mas fotos.

La primera es sellando bien pronto en Estella.

Pedaleando por la Rioja.

Y bajando como se puede unas escaleras.

 

Posando en Puente la Reina

 

Tierra de Campos, en la provincia de Palencia

Canal de castilla

De Noche saliendo de Carrión de los Condes

En Beldorado con los italianos

 

catedral de León

Sahagún

Nuestros amigos de madrid

Por el Bierzo leones

 

Manjarín


Cruz de Ferro

O Cebreiro

Caminos de galicia

 

Santiago

Amigas de santiago

De vuelta

 

que recuerdos

 

Snif, snif:crybaby2 qué emoción volver a ver esos paisajes...

 

:crybaby2

 

Bueno ahi estan las fotos no han tardado tanto. Que os ha perecido?