paece que no hemos visto tetas en la vida por dios! donde voy yo pocas se ven a las 19 estoy en la bascula como un clavo
Pues yendo sólo tres, Jorge dijo que entrábamos todos en su coche. Igual podíamos quedar en el Toledo a las 07:45. ¿Cómo lo veis?
Por mi ok, pero que si vamos apretados yo no tengo problema en llevarme el coche. Me largo otra vez, hasta la noche, ya direis.
***** que ruton la ******!!! durisimo sobre todo por el calor que machacaba bastante, que MArio haga cronica, de nuevo de lujo, duro y disfrutable contamos ademas con guia local y cerveza post ruta. Patas pa chopped, cubierta trasera a la basura ya... 2600 kms fui muy optimista. Si no es por la raja si que hubiese tirao 500 kms mas al menos. ¿Donde ocmprais cubiertas?
Yo no habia probado las schalwe pero me han encantado. Me he quedado con ganas de pillar para trasera de la cube la que ha cogido alex. La racing ralph TLR de doble defensa, q viene con los flancos reforzados. Creo que eran 540 gramos. Yo atras de la trek puse la smart sam y estoy encantado pero no la hay en version tubeless ready.
no se yo las chualbe, solo le gustan a Alex... y todavia no la has probao en condiciones , lo de Brihuega era un rulillo!! wahooo hermidaaa
Bueno gente, ya por fin me he sentado un rato, así que voy manos a la obra con la tortura. Esta vez nuestra historia comienza en coche, demasiado temprano para ser verdad... :crybaby Una vez apilados todos en la "Atilaneta" arrancamos, para no parar hasta llegar a Villalba, donde nos esperaba Ramón, mi querida cabra serrana. Y así nos juntamos Atila, Luhigi, Ramón y yo mismo, los cuatro jinetes de la apocalipsis. Nuestra intención era hacer un reconocimiento del recorrido de la Villaba Xtrem, a la que tenemos intención de asistir el día 1 de septiembre Jorge y yo (ya estáis tardando en decidiros alguno más, os arrepentiréis). Esto es lo que salió: La gráfica permite que os hagáis una pequeña idea de lo que nos encontramos, y digo pequeña, porque en la gráfica no salen los millones de piedras y su variado tamaño, forma y concentración, porque eso sólo lo recuerdan nuestras maltrechas patas :mrgreen: En fin, desembarcamos, montamos nuestras burras y comenzamos a dar pedales sin más dilación. A las nueve de la mañana la temperatura es buena, y como estamos en la sierra, supuestamente no sufriremos demasiado por el calor, ¿no? Aún así, nos todos hemos traído mochila y muuuuucho agua, por si las moscas, también llevábamos cámaras de repuesto y todo eso, porque como nos dijo Jorge, los que no llevábamos tubeless (todos menos él) teníamos serias posibilidades de pasarlo bien reparando pinchazos y cambiando cámaras... :loco Empezamos subiendo tranquilos, cruzando Collado Villalba para pasar rozando la urbanización "El Mirador", todo esto cuesta arriba, igual que la pista que cogeríamos después para adentrarnos en nuestro pequeño infierno. Teniendo en cuenta que empezamos a subir nada más bajarnos del coche, mis patas no pararon de quejarse hasta que ya no tenía conciencia para escucharlas... cosa que no tardó mucho en suceder. La cuestión es que al mismo tiempo la sonrisa me iba creciendo de forma proporcional. ¿Cuándo sucedió esto? Justo cuando dejamos la pista para subir hacia el Mirador, justo al lado de Peñaliendre (vaya nombrecito). Menuda subidita... sendero estrecho, con achuchones a ratos, pero siempre cuesta arriba, sembrado de piedras, arena y bien cercados por las omnipresentes jaras. Aquí a Ramón le tocó sufrir tanta piedra, ya casi arriba del todo. Al fin y al cabo, ¿qué son 6,5 kms de subida con unos 3 de ellos plantados así con la pétrea flor típica de la región? Pues una auténtica pasada la2. Coronamos con parcela de Ramón y parcela del jefe... El tema estaba en que la misma piedra que nos acompañó cuesta arriba, nos acompañaría también cuesta abajo. Para ser sinceros, no recuerdo si mi Magura había tenido que currar tanto alguna vez. Una continua sucesión de sendero terroso sembrado de piedras, intercalado con enormes rocas graníticas que de cuando en cuando hacían las veces de camino, zanjas, etc hicieron que no mucho después de empezar el descenso decidiese comprar mi parcelita serrana (es que en la parte alta las vistas eran mejores, ja ja), y fue ahí cuando descubrí lo blanditas que son las jaras (menos mal que no estaban demasiado pegajosas, si no no salgo). Me vais a perdonar por no tener fotos del descenso, pero es que era imposible parar de forma voluntaria, según vas pasando piedras, lo único que quieres es ir a por la siguiente. El sendero a veces se convertía en un surco profundo, como de un metro, con sus correspondientes piedras en el fondo, con lo que a veces tocaba intentar encalomarte a la pared lateral del surco (fue en esos momentos cuando me alegré de llevar mi captain y mi advantage :amo Simplemente dieron la talla más que con creces). Como yo no quería parar para hacer fotos, fue nuestro querido Atila (The one and only tubeless man) el que decidió darnos motivos para respirar un poco... Sí, pinchó, bueno, más bien rajó la cubierta, así que le tocó destubelizar la rueda trasera para poder seguir y terminar la bajada, de alrededor de 2 kms. Y nosotros, como buenos españoles le dimos nuestro apoyo observando lo bien que reparaba el desaguisado. Una vez solucionado seguimos a la caza del segundo bucle de un total de tres que harían nuestras delicias en la zona de la cuenca alta del manzanares. Para este segundo bucle tendríamos menos piedra, pero senderos igualmente retadores, aunque algo más rápidos, con saltos que nos animaban a despegar las ruedas del suelo y a la sombra, cosa que poco a poco iba haciéndose algo necesario, ya que hasta el termómetro empezaba a soñar con una cervecita fresca. El gladiador que más lo iba sufriendo era Ramón, y es que tras mucho tiempo sin coger la bici, lo cierto es que le estaba echando muchos huevos, pero las fuerzas poco a poco se iban apagando, y no porque sí, ya que el terreno seguía castigando sin descanso. Cuando disfrutabas de una bajada, tocaba esforzarse por esquivar zanjas y grandes piedras de granito con sus correspondientes escalones, y cuando eso se acababa, tocaba escalar otra senda engañosa en la que nuevamente tocaba meter riñones o montarte en un granito de aproximadamente 20 metros de largo y 4 de alto para volver al camino. Yo lo tenía más que claro, cada vez que el sendero picaba para arriba, automáticamente el plato pequeño se ponía a currar, usando piñones bajos, pero plato pequeño, porque siempre tocaba subir los piñones, y así no me pillaba el toro. Cuando llegamos al tercer bucle, Ramón se retiró, para esperarnos en el coche para las cervezas finales. Se fue con los deberes más que hechos, y yo me alegré muchísimo de que se animar a acompañarnos, ya que espero que estos pequeños encuentros le vayan picando poco a poco para retomar la bici con fuerza y empezar a putearnos como sólo él sabe hacer :clap. Nosotros fuímos a por el tercer bucle del demonio, cuando el sol empezaba a torrar a base de bien. Este fue el más corto, lo cual no quiere decir que no tuviese lo suyo, puesto que además de tener más de lo de los demás, se añadía una pared de granito de unos 50 metros que tocaba escalar, eso sí, agarre no nos faltó (yo creo que nos dejamos allí la mitad de los tacos). Yo me hice el valiente, me guardé un piñón, y me tocó echar pie a tierra. Una vez finalizado el tercer bucle, era el momento de abandonar la zona para pisar la parte alta de la urbanización Fontenebro, pero no sin disfrutar de un laberíntico sendero en el que no veíamos nada, ya que estábamos total y absolutamente cubiertos por la vegetación, que no nos dejaba ver más que hasta la siguiente curva... Más de lo mismo, diversión en dosis industriales que nos hicieron llegar a la urbanización para coger una pista que nos llevaría a Moralzarzal. La pista forestal nos hizo un gran favor, puesto que no será nuestro terreno favorito, pero mis patas y mi patata pedían clemencia, Luís pedía agua y Jorge silencioso saboreaba lo que llevábamos encima. Ahora íbamos hacia los herrenes del Reventón, y yo empecé a preguntar dónde podíamos coger agua a la gente que nos cruzábamos, hasta que dimos con un camping justo al comienzo de una nueva subida, donde repusimos. Yo llevaba cerca de la mitad del agua, pero un poco de agua fresca nunca debe despreciarse :babas Una vez repuestos comenzamos el repecho, esta vez sin complicaciones, pista ancha y pindia, como dicen en Cantabria. Justo antes de coronar tomaríamos un senderito estrecho cuesta abajo que volvería a hacer nuestras delicias, de unos más que de otros, ya que todos nos saltamos una pequeña parte del sendero al coger una pista muy rota, suponiedo que sería ese el recorrido. Yo me di cuenta del despiste a mitad de la bajada y lo retomé, y Luís me siguió, Jorge siguió bajando, pensando que el equivocado era yo... ¡él se lo perdió! Una vez abajo, volveríamos a retomar la cañada real, que nos llevaría a cruzarnos con unas cuantas féminas ciclistas y a casi tocar Cerceda, donde dimos la vuelta para regresar a Moralzarzal tocando alguna que otra senda, nuevamente divertida. Una vez en Moralzarzal estábamos hasta cierto lugar de nuestra entrepierna, y "sólo" nos quedaba acariciar el Cerro del Telégrafo... :alloretoYo estaba decidido a sufrir, pero miramos el reloj y decidimos que ya estaba bien, y además Ramón nos estaba esperando. Cruzamos Moral, pisamos un tramo de carretera de esa que no gustar hasta que encontramos un sendero que nos llevaba paralelos a la carretera para alcanzar nuestro preciado trofeo: Y con ésto y un bizcocho... 40 kms y 900 m de desnivel más millones y millones de piedras, surcos, zanjas... la Simplemente impresionante, y eso que no hicimos entera ni siquiera la marcha corta. Sólo sé que el día 1 quiero estar aquí sí o sí, que voy a hacer la "corta" (lo tengo más que claro), que pobrecitos de los que hagan la larga y que por favor por favor por favor, que baje la temperatura para ese día. Hoy me he extendido demasiado en la crónica, pero lo cierto es que no he querido dejar nada en el tintero. c3 Que ustedes lo disfruten.
¡CHAPÓ!!!. Mario, he vuelto a revivir la pedazo de ruta de ayer, que ganas tengo de volver... Hoy he vuelto salir con Andrés, si, si, ya lo sé, que salgo mucho.... vueltecita maja, hablando, sé que Andrés tenía ganas de parque, pero hoy le he llevado a mi terreno, no estaba yo para mucho trote con la que nos metimos ayer. 35 por lagartos, subida por la pista, hueros, predicador, valverde, trialeras de torres, motocross, y vertedero, al final cervecita, rica, rica. Andrés es lo mismo que no salga, sigue fuerte de *******, y ya está guapo de nuevo con su labio medio arreglado... Por cierto de 6 nos quedamos en dos.. que si uno en el Ocejón, que si otro malito, el otro que no le daba tiempo a llegar de Galicia, en fin, que os lo habéis perdido.
jodo que cronica, que bien salen las fotos. Agua , entrenar para ViX a lo burro me voya recluir 15 dias a darle a solas en serio, dura dura y a comprar la piton ya
Ha sido dificil no tocarse pero es que vaya par de ruedas que lleva... Creo que son SmallBlockEight... Pero de small no tienen nada, joooooeeerrr. Yo quiero una como esa pa mi. Que sea ciclista digo... Joooooder lo que me estoy perdiendo... Y mas que me voy a perder por desgracia... Un saludo Mañaneros, a ver cuando me puedo permitir solucionar mi problemilla de adiccion a las dos ruedas y puedo volver a acompañaros... Que envidia me dais cabr***!!!
Menuda crónica Mario, vaya salida serrana que me he perdido, pero estaba de vacaciones y no pudo ser, me alegro que la hayais disfrutado porque viéndoos disfrutar uno lo pasa bien... Es posible que esta tarde desenpolve la bici y mañana me de un rulo sobre las 9:00 para ir retomando contacto, a ver que tal se da, ojalá no tenga que arrastrarme mucho..
Hola Adrián, me alegra tener noticias tuyas. ¿Cómo va lo tuyo? A ver si pronto vuelves a tener montura. Un saludo. Pues está vez os habéis perdido una ruta épica, la verdad. Ha sido una pasada, pero al igual que Jorge dice, estoy de acuerdo en que hay que darle caña para llegar fino a la marcha. Mañana es posible que quede con un colega de Pozuelo por la mañana. Él no se lleva demasiado bien con trazados técnicos, así que posiblemente sea una ruta asequible para tu maltrecha espalda. Te iré contando, ¿vale?
Mario mis felicitaciones.... Tanto por la ruta como por la crónica.. Pena de verla desde el móvil.. Es lo malo de irse de vacaciones.... Pasarlo bien a ver si me puedo escapar un día y explorar el monfragüe..