RODADAS PERDIDAS: Reportorio de Caminos de Villuga - 1546

LA MURALLA CHINA esta considerada como un topónimo en el IGN como demuestras el mapa 1:50.000 en su última edición.

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Y en la propuesta otoñal no solo pasaremos por esto...

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¡VAYA!​

Sino que visitaremos lugares tan hermosos como

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La CASCADA DEL ALJIBE o POZAS DE MATALLANA que también merecen un ¡VAYA!

 

VUELTA AL HUECO DE SAN BLAS EL VIEJO

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En septiembre del año pasado escribía las siguiente líneas de esta ruta que hacia por primera vez:

"Meridiano, Iriales, Matasanos, Herradas, Veneno... Arroyos de transparentes aguas que se vadean una y otra vez. Sobre los granitos de la sierra de Guadarrama han trazado su devenir, guardando con celo el recuerdo de los últimos neveros cuaternarios. La ruta sigue primero las zonas bajas de las laderas montañosas, entre robledales y aromáticas praderas, para luego elevarse hasta los pinares del pico Najarra, alcanzando la cota 1462 m. de altura en el espectacular Mirador de El Olmo y terminar en la depresión glaciar del Hueco de San Blas.

Al Hueco de San Blas el Viejo se va por ir, como apreciado destino de gran parte del pelotón ciclista guadarrameño, que nos recuerda el mítico valle de la Arcadia. Esta amplia y profunda depresión abierta en el flanco meridional de la Cuerda Larga, que pone fin de manera abrupta al roquedo de la Pedriza del Manzanares, es un mundo en sí mismo. Cuando se está en este lugar, los sentidos adquieren tal dimensión que se llega a percibir la naturaleza en todos sus estados. Es de esos lugares donde se perciben "los sonidos del silencio". Por ello este pequeña grupeta cicloturista evitara las trialeras, como la denominada de Las Herredas (categoria DH) para minimizar el impacto de nuestro paso por este lugar, utilizando las pistas forestales que ya en si son una herida en este lugar sinónimo de naturaleza pura.

NDICE DE DIFICULTAD IBP = 40

* Distancia total: 33.285 Km
* Desn. de subida acumulado: 735.9 m

Con dos fuertes repechos de +10%
1. en el Km. 9.022 al 11% de pendiente durante 162 m.
2. en el Km. 9.511 al 10% de pendiente durante 158 m."

Mañana Domingo volvemos

 

Disfrutarla Gonzalo, nosotros estuvimos hace unos meses y es una ruta excepcional, yo ya la he hecho varias veces y es espectacular, una subida constante pero por pista muy llevadera , saludos fiera

 

VUELTA AL HUECO DE SAN BLAS EL VIEJO

https://www.cicloide.com/rutas.php?r=340428&FRE=5#fre

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Soto del Real conocido no de tan lejano como CHOZAS DE LA SIERRA a 876 m. de altura, punto de partida de nuestra visita a un clásico del mountainbike madrileño, la conocida como el Hueco de San Blas el Viejo y más concretamente al MIRADOR DE EL LOMO a 1462 m. de altura. Una depresión que se alza al oriente de la Pedriza del Manzanares y bajo el pico de La Najarra. A las 08:00 h. tomamos el antiguo Camino a Rascafria actualmente el PR-12 de los de su clase , hasta el cruce con el Cº de la Cruz del Toribio donde pasa a denominarse como la importante GR-10 que dejaremos muy cerca de la Capilla de San Blas, donde se encontraba el despoblado de San Blas de la Ferrería o la Herrería, santo patrón que da nombre a la depresión geológica a la que nos encaminamos, tomando en ese momento el Camino de la Peña del Madroño.

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En este Km. 6,500, habiendo escalado unos 250 m. verticales de los casi 800 m. que se compone el recorrido, es un momento crítico, el compañero de ruta pasa un momento crisis y me dice que continúe el itinerario, que él se vuelve al coche a esperarme, es el tiempo de motivar y animar a José Manuel para que tire para adelante, eso y un gelito que en ocasiones es milagroso. Desde el Km. 2,600 hemos comenzado un Puerto de 2ª Categoría de algo más de 13 Km. que nos llevará a unas vistas espectaculares que mi amigo no puede perderse, pues es su primera visita al Hueco de San Blas. Entramos en un bosque de pinos y robles ¡Bienvenidos al Otoño! por una Pista Forestal que nos conduce al Mirador de Julia con las vistas espectaculares de Las Torres de La Pedriza, una visión pedricera única. Giro a la derecha y subimos por la Senda de la Bufanda que bordea el Hundido, mal conocido como Hoya de San Blas, que al completar el Km. 16 llegamos al punto más alto de nuestro recorrido en la solana de El Lomo donde se tienen unas vistas de la llanura madrieña y del skyline de la ciudad de Madrid.

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Rico platanito en uno de los lanchales contemplando el paisaje y de vuelta esta vez bajando o como mejor me gusta decir precipitandonos desde el Mirador de Julio por la Senda de la Abutarda, que creo que es una corrupción de "Bufanda" o esta de la anterior. Llegamos al Polideportivo donde hemos dejado el coche y vuelta a casa después que Jose haya aguanto el puerto como un campeón, un mal día lo tiene cualquiera y lo bueno de ir acompañado es el apoyo de los compañeros, claro está que ni se me ocurrió contarle en ese momento de crisis los poco más de 600 metros verticales que nos quedaban. Volveremos para hacerla en sentido contrario.

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Esperemos que llueva pronto, por nuestra salud, porque la Tierra lo necesita, y porque así estaban este verano

 

PROPUESTA OTOÑAL: VALLE DE IRUELAS - próximamente
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Todo un clásico otoñal, la Reserva Natural de Valle de Iruelas, con una ascensión acumulada de algo más de un kilómetro en casi 35 kilómetros de recorrido, donde se acometen un Puerto de 1ª Categoría (Puerto de Casillas) y uno de 4ª Categoría. Un recorrido donde no habrá más remedio que echarse la bici a la espalda en un trecho por la cuerda de estos montes de la Sierra de Gredos y donde los colores del castañar nos hacen olvidar cualquier sufrimiento.

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Pues allí estuvimos...

CRÓNICA PRÓXIMAMENTE​

 

Hola compañeros, ¿qué tal estaba el castañar?.
Nosotros tenemos previsto ir este finde. Llevamos yendo por estas fechas los últimos 6 años.

 

https://www.relive.cc/view/1262537243​

Buenas Noches,
No bajamos hasta la garganta donde se encuentra EL CASTAÑAR (ya lo habíamos visitado hace un par de años), pero supongo estaría infectado de gente y no teniamos ganas de ir sorteandolos, ese lugar va tener serios problemas como no lo controlen. Como veras en la imagen siguiente pudimos bajar donde se encuentra El Abuelo en el Km. 17,47 de nuestro recorrido tras haber visitado la Casa del Pozo de las Nieves, pero continuamos rodeando Cabeza de la Parra para volver a Las Cruceras que es de donde habíamos partido. Todavía nos quedaba el Puerto de 4ª Categoría del Portillo de San Francisco, antes de verternos precipitadamente hacia Embarse del Burguillo. Terminamos chupandonos algo más de un kilómetro vertical, para ser más conciso un Desnivel de subida acumulado de 1106.7 m en 35 Km. de distancia, cierto es que el Puerto de Casillas desde Las Cruceras, en los primeros 11 kilómetros de la marcha, te mete 719 m. de verticalidad a una media de 7% de pendiente para abrir boca.

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Espero que lo paséis bien y disfrutéis de esta Reserva Natural a pocos kilómetros de Madrid.

 

Gracias por la información. Si, la subida del puerto desde Las Cruceras tiene lo suyo....
Veo que bajasteis por donde subimos nosotros un año con.....nieve en el camino

 

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Volvemos a adentrarnos en uno de esos parajes edénicos y adánicos de la geografía española que son un regalo para los ojos durante el otoño, más concretamente en los confines orientales de la Sierra de Gredos, una sierra que separa el Valle del Alberche del Valle del Tietar, un paraíso biológico y santuario para grandes rapaces como el buitre negro y el águila imperial. A poco más de una hora de Serranillos del Valle se encuentra el VALLE DE IRUELAS conocido durante la Edad Media como VALLE DE ERUELAS que, hoy por hoy, es uno de los más valiosos enclaves de todo el Sistema Central, donde la naturaleza derrocha energía y configura el mejor escenario para la biodiversidad y los sentidos para el desarrollo de la práctica del cicloturismo.

Son las 08:00 de una mañana de otoño, cuando atravesamos en coche la presa de hormigón del Embalse del Burguillo, que retiene las aguas del río Alberche para el abastecimiento del liquido elemento a los pueblos limítrofes, y a la vez es una fábrica de luz en años donde no somos víctimas de una sequía que hace agonizar estos mares interiores. El pantano esta en mínimos históricos y las lluvias de días atrás no son suficientes para saciar esta cuenca que se nos presenta desértica. Mientras cruzamos la presa se me viene a la cabeza el letrero que lucía el antiguo puente sumergido en las aguas del embalse, que rezaba “Puente burguillo quien te hizo, Hércules y su hijo, te caerás te levantarás, pero nunca te pondrán como estás”, un recordatorio para los transeúntes que Hércules recorrió estas tierras siendo los verracos de piedra restos fosilizados de los Bueyes que robo al rey Gerión. Giramos a la derecha y serpenteamos por la orilla derecha hasta alcanzar las Casas de las Cruceras (650 m. de altura) donde se encuentra un Parking que servirá de punto de inicio a nuestra travesía por el VALLE DE IRUELAS.

https://www.cicloide.com/rutas.php?r=350389
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0,000 – Se inicia un Puerto de 1ª Categoría donde escalaremos 729 m. verticales en 11 Km., nos espera poco más de una hora y media de pendiente hacia arriba desde Las Cruceras, núcleo de explotación resinera durante la segunda mitad del siglo XIX perteneciente al termino municipal de El Barraco – Ávila.

1,894 – Continuamos por la izquierda dejando la pista que continua por la orilla del Embalse dirección a la aldea de La Rinconada. Seguimos por la antigua Ctra. de Ávila a Sotillo, un camino medieval con hechuras de calzada romana, que uniría las actuales poblaciones de Talavera de la Reina y Ávila, cruzando por estos lares a través del Puente del Burguillo (Burguyello) o conocido también como de Albarache o del Arco, para proseguir hacia el norte por la garganta que forma el arroyo de la Gaznata, alcanzando el puerto de las Pilas y de allí a la ciudad de Prisciliano.

Este camino que sube al Puerto de Casillas pasa junto a varias piscifactorías (abandonadas) y cambia de margen una vez que atraviesa el ARROYO DEL VALLE por un puente arropado por un denso bosque de alisos. Nos introducimos de lleno a la GARGANTA o VALLE DE IRUELAS que da nombre a la RESERVA NATURAL que engloba distintas gargantas de la umbría de la SIERRA DEL PALANCÓN. Nos sentimos abrazados por una naturaleza y sus sonidos de unos arroyos que no entienden de sequias nutridos de los números manantiales que guarda esta garganta.

6,642 - Termina el asfalto (forestal) y continuamos por una pista de tierra en muy mal estado. La cosa se va poniendo seria, sirva la siguiente imagen para ver con detalle la subida de este que sería nuestro primer Puerto de 1ª Categoría que hemos subidos tanto José Manuel como el que suscribe.

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Durante estos once kilómetros pasamos toda clase de crisis y milagrosas recuperaciones, una cura de humildad que sanea nuestra alma. A pocos cientos de metros de coronar encuentro fuerzas de flaqueza y pego un hachazo que me llevan a sacar un minuto a José Manuel que hasta el momento habíamos estado muy igualados y que incluso en los últimos kilómetros había sacado distancia.

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11,27 – Alcanzamos el collado de Puerto de Casillas a 1.467 m. de altura con la satisfacción de haber sufrido pero tampoco en exceso, con unas vistas asombrosas del Valle del Alberche al fondo, pareciéndonos increíble haber llegado desde allá abajo. Son momentos de tomarse un platanito y posar en el photocall que forma un monolito de piedra que indica que estamos en el Valle de Iruelas. Por la otra ladera, la que sube de la localidad de Casillas, empiezan a llegar senderistas. En pocos minutos las nubes nos rodean, y notamos un desagradable frio, es momento de ponerse en marcha.

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Continuamos por la SENDA DEL POZO DE LA NIEVE que sale dirección Este junto al monolito donde encontraremos toda una serie de balizas que hace imposible perderse. Seguimos ascendiendo por una trocha que adquiere un trazado prácticamente horizontal que se adentra entre piornales y pinares. Pocas son las pedaladas que damos para echar el pie a tierra y continuar así casi cuatro kilómetros , lo que fue hora y cuarto, con la bicicleta arrastras, a un hombro, a dos hombros, a una rueda por un singletrack imposible para ciclar, perdiéndonos las vistas a nuestra izquierda por la niebla que inunda el valle y que nos había sorprendido al coronar el puerto anterior.

13,13 - Muy pronto atravesamos el nacimiento de la Garganta de los Acebos a 1.532 m de altura. Después continuamo por la ladera de la umbría del Cerro de la Piña. Es un ejercicio de montañismo combinado con ciclismo que en tiempos de nieve tiene que ser jod**io.

14,08 – Por fin alcanzamos el Prado de la Manga y podemos dar unos pedales por estas praderas de alta montaña.

15,28 – Llegamos a la CASA DEL POZO DE LA NIEVE a 1.472 m. de altura que es uno de nuestros objetivos de esta ruta. Un POZO DE LA NIEVE protegido por la propia edificación que lo encierra y que ha sido restaurada por la Junta de Castilla y León. Este tipo de pozos, con 4 metros de diámetro y 6 de profundidad, al más puro ¡ESTO ES ESPARTA!, estaba destinado antiguamente a depósitos de nieve para abastecer de hielo a los pueblos de toda la comarca. Unas mandarinas al buche y pá lante.

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15,97 – Desde el Portacho del Pozo comienza un descenso hacia las pistas forestales de la Garganta de Yedra. Caminos antesala del CASTAÑAR DEL TIEMBLO.

17,47 – Conectamos con una de estas pistas forestales que nos llevaran de vuelta al valle del Alberche, la presencia de la explotación maderera es evidente.

18,77 – Coronamos el pequeño Portacho de la Cerecera antesala de de un rápido descenso, pero todavía nos quedara que penar un poco.

25,74 – Nos damos de cruces con el Portacho de San Francisco, un puerto de 4ª Categoría de unos 1,5 Kilómetros, teniendo que escalar 120 m. desnivel + acumulados, con una pendiente media del 10%, donde este que suscribe vive sus peores momentos, perdiendo hasta 2 minutos con respecto a mi compañero de fatigas.

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27,05 – En este alto del Portacho de San Francisco se vislumbra las escasas aguas del Embalse del Burguillo, a partir de aquí no dejaremos de bajar por Garganta Honda.

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33,04 – Ya estamos en la Ctra. de Las Cruceras, solo nos queda bordear el pantano para alcanzar en pocos minutos a Parking donde dejamos el coche.

34,82 – Propuesta otoñal conseguida después de cuatro horas y media desde que iniciamos nuestra singladura. VOLVEREMOS, SIN DUDA.

https://www.relive.cc/view/1262537243​

 

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A estas alturas de noviembre deberíamos ver correr el agua en la Fuente de la Teja. Pero sigue sin llover. Y las previsiones dicen que ni esta, ni se la espera la tan deseada lluvia. Para los que hemos ciclado innumerables veces hasta este lugar nos parece imposible ver esta imagen de una fuente que incluso en pleno verano nos ha regalado frío y abundante caudal de agua, sirva lo que decía la revista del Instituto Geologico y Minero de España en el año 1951 donde señalaba que esta fuente tenía un caudal de dos litros por segundo. Uno de los pocos oasis del Sur de la comunidad de Madrid, por no decir el único, ha dejado de dar agua, y la poca que diera en los últimos tiempos no era potable como reza un triste cartel.

Desconozco desde hace cuanto tiempo viene presentandose esta vista, en Agosto caia una chispa de agua, pero los cicloturistas y viajeros en general estamos de luto. Solo espero que el manantial que la nutre se recupere con las lluvias venideras, que espero no tarden mucho en llegar.

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Nuestra propuesta cicloturista otoñal de este fin semana transcurre por un paraje muy herido por lo natural, pues buena parte discurre por una profundidad no ponderable, y concavidad indecible, bien apartada de poblaciones, con zonas aisladas por las aguas que la horadan y la cercan. Son muchas las nieblas que la ofuscan, y a cada paso las piedras se desgajan, porque son de una clase deleznable, porque las desunen las muchas lluvias, los calores del verano y los hielos del invierno. Considerada por algunos como una profundidad horrenda donde no pueden vivir ni las fieras. Un "desierto" como gusta llamar a los franciscanos a estos lugares apartados, donde hace 4.000 años se crearon una serie de estaciones de pinturas rupestre. Al borde del precipicio un abrigo con 182 pequeñas imágenes que representan figuras humanas, animales y símbolos abstractos de forma esquemática, destacando un pequeño antropomorfo de apenas 5,5 cm de largo, con el cuerpo en negro-azulado, sobre el que se han añadido, en rojo, la cabeza con tocado y elementos de adorno en el cuerpo y manos además de una cola posterior. En la parte superior del conjunto se encuentran dos figuras una tumbada y otra en pie alzando un objeto que podría ser un hacha o una alabarda, lo que ha llevado a considerarla como una escena de violencia. Según investigadores de la UNED ese color azulado esconde un mineral que nunca se ha utilizado con fines pictóricos en la prehistoria, y que no se encuentra en estas tierras. Sin duda, la representación de la lucha de estos primeros hombre contra un ser sin identificar, tal vez un demonio, monstruo o genio maléfico, que tuvo lugar en estos parajes y que durante siglos comunidades de eremitas, santos y frailes continuaron con esta tradición custodia de este barranco mágico.

¿Sabeis de que lugar estamos hablando?

 

Nuestra Señora de los Angeles de la Hoz? Duratón? Ermita de San Frutos?

 

Dónde habreis estado..... ¿habeis podido salir de ese barranco infernal?

 

Hay le has dado JoLu. Salí escalando de esa profundidad no ponderable como leerás en mi futura crónica LCIRPM.

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Este domingo he llegando hasta el MIRADOR DEL MONASTERIO DE LA HOZ en las HOCES DEL RÍO DURATÓN, que se encuentra en la orilla derecha del río Duratón, partiendo del mismo Sepulveda. Un mirador poco conocido que no aparece en los mapas, ni en las guías turísticas y cuyo camino no se encuentra balizado o señalizado en ninguna parte, donde se obtienen una de las mejores vistas, por no decir la mejor de este cañón, un deleite para los ojos. Tirando de cartografía antigua, ortofotos y del catastro pude confeccionar el track que me llevo al borde del precipicio a través de viejas sendas, cuyo uso se perdió con la construcción de la presa de Burgomillodo y que insitu se ven bien restos de su trazado.

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Un meandro espectacular donde descansa este viejo monasterio de Ntra. Sra. de los Ángeles de la Hoz, a modo de cabeza de un dragón que así se me antoja a mi. Sin duda valió la pena antes que comiencen las restricciones por la cría de los buitres que pueblan estos cañones.

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Próximamente crónica.

 

DRAGONES EN LAS HOCES DEL RÍO DURATÓN
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Nuestra propuesta cicloturista otoñal de este fin semana transcurre por un paraje muy herido por lo natural, pues buena parte discurre por una profundidad no ponderable, y concavidad indecible, bien apartada de poblaciones, con zonas aisladas por las aguas que la horadan y la cercan. Son muchas las nieblas que la ofuscan, y a cada paso las piedras se desgajan, porque son de una clase deleznable, porque las desunen las muchas lluvias, los calores del verano y los hielos del invierno. Considerada por algunos como una profundidad horrenda donde no pueden vivir ni las fieras. Un "desierto" como gusta llamar a los franciscanos a estos lugares apartados, donde hace 4.000 años se crearon una serie de estaciones de pinturas rupestre. Al borde del precipicio un abrigo con 182 pequeñas imágenes que representan figuras humanas, animales y símbolos abstractos de forma esquemática, destacando un pequeño antropomorfo de apenas 5,5 cm de largo, con el cuerpo en negro-azulado, sobre el que se han añadido, en rojo, la cabeza con tocado y elementos de adorno en el cuerpo y manos además de una cola posterior. En la parte superior del conjunto se encuentran dos figuras una tumbada y otra en pie alzando un objeto que podría ser un hacha o una alabarda, lo que ha llevado a considerarla como una escena de violencia. Según investigadores de la UNED ese color azulado esconde un mineral que nunca se ha utilizado con fines pictóricos en la prehistoria, y que no se encuentra en estas tierras. Sin duda, la representación de la lucha de estos primeros hombre contra un ser sin identificar, tal vez un demonio, monstruo o genio maléfico, que tuvo lugar en estos parajes y que durante siglos comunidades de eremitas, santos y frailes continuaron con esta tradición custodia de este barranco mágico.

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7:30 h. en villa segoviana de Sepúlveda, comienza a amanecer, conforme me ido acercando en coche, el medidor de temperatura ha ido bajando hasta fijarse en los -6º de temperatura en estos primeros instantes del alba, ¡vaya con Castilla!. Desde un parking a la entrada de la ciudad comienzo a dar pedales con sus habitantes aun dormidos, entrando por la Puerta del Postiguillo Km.0,443 y comenzando a ascender hasta llegar a la iglesia de la Virgen de la Peña en el Km. 0,882 de la travesía. Ningún alma, tónica habitual durante todo el viaje, en ocasiones se agradece.

https://www.cicloide.com/rutas.php?r=350918
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Cuando alcanzo la plazuela de la iglesia de Ntra. Sra. de la Peña me percato de una señal inequívoca que voy por buen camino, en el dintel de la puerta de acceso un pantocrátor que nos observa y a su derecha el DRAGÓN, luchando con el caballero, una clara representación del apocalipsis de San Juan. ¡AQUÍ HAY DRAGONES!.

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Junto al antiguo cuartel de la Guardia Civil cojo el camino (senda de los dos ríos) que sale de la villa medieval en dirección oeste, en pos del barranco del río Duratón.

1,795 - Dejo cualquier vestigio de civilización a través de la monumental Puerta de la Fuerza, desde en la que uno se precipita al fondo de este cañón formado por el continuo discurrir de este Duero pequeño que es lo que significa Duratón. Una bajada empedrada utilizando la materia prima del terreno que en ocasiones forma escalones que hacen que sea un descenso técnico. Una calzada romana que pone en manifiesto el pasado romanizado de esta ciudad, y el uso del barranco como vía de comunicación hacia el oeste.

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2,335 - Ya en el fondo se llega al Puente Picazo que cruza a la orilla derecha del Duratón, que no dejaremos hasta alcanzar el que para mí es el meandro o hoz más espectacular del Parque Natural. Es bonito recorrerlo en cualquier época del año pero se me antoja algo mucho más especial en el otoño.

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2,777 - Subida vertical, vamos, utilizando escaleras, que obligan a echarse la bici por montera hasta alcanzar una pasarela que va pegada a la pared del barranco y que de nuevo va bajando delicadamente a la rivera del río.

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En esta soledad que tanto agradecieron los antiguos ermitaños que habitaron este barranco siglos, se me viene a la cabeza el episodio ocurrido a finales de la década de los noventa en una localidad a pocos kilómetros de este lugar, donde un pastor encontró casi trescientas ovejas muertas con la marca de un pequeño orificio de un punzón como única señal de lo ocurrido, y para más inri, vacías completamente de sangre, como es lógico la inquietud y la angustia hicieron presa de las gentes. Los niños dejaron de ir al colegio y las armas se prepararon para ser disparadas. Lo más extrañamente curioso, un detalle no poco importante para los pastores fue que los buitres, animales más que habituales en esa zona, se negasen a degustar ese privilegiado festín de miles de kilos de carne muerta. En tan solo una hora el habilidoso animal, una bestia había provocado toda una matanza en una sola noche. Oficialmente se descartó que fuese un lobo, pero si no fue un lobo, ¿qué extraña especie pudo cometer ese desaguisado? Además los animales no mostraban ningún síntoma de haberse defendido, aparecieron con un gesto de una extraña sumisión. Como si uno a uno, a cada animal le hubiese ido succionando su sangre y sus vísceras. El Seprona realizaron varias y extensas búsquedas, intentando dar con el enorme carnívoro que mantenía en estado de pánico a los lugareños, pero no pudieron dar con él.

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Soy consciente que soy una víctima fácil en este desfiladero, y recuerdo que este ser ha estado campando a sus anchas desde hace milenios como atestiguan las pinturas rupestres a pocos cientos de metros del mirador que voy alcanzar en este mañana y de cuyo conjunto he comentado en la introducción de esta ruta.

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2,965 – Aquí comienza verdaderamente el camino por el barranco o cañón que une Sepúlveda con el Puente de Villaseca, por una senda tapizada con las hojas otoñales que se encuentran escarchadas, produciéndose el tan característico ruido que genera al pasar las ruedas de nuestra bicicleta. Un recorrido por este profundo desfiladero de 10,12 Km. de recorrido, que tiene algunas, pocas, partes técnicas, pero muy ciclable en general, pedaleando con la precaución del que no sabe que hay debajo de la hojarasca en esta su primera travesía y por ello extremo la prudencia para evitar cualquier tipo de accidente. Tardando poco más de una hora para completar el recorrido, pudiendo acelerar la marcha en los últimos kilómetros de esta primera parte.

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Respecto a eso que las hoces de Duratón son un microclima, mis coj*nes cascabeles, un frio terrible en el fondo de un barranco donde los incipientes rayos de sol entraban solo en algún giro de los meandros que lo forman. Las extremidades de los pies las tengo insensibles. Nada que ver con la temperatura que soportamos en la transierra de la ciudad y tierra segoviana, como lo fue Serranillos del Valle – Madrid.

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Me sorprende la gran cantidad de restos de fogatas que hay en el fondo del barranco, que en algún caso se les había ido de las manos, es un peligro esta clase de acciones para el Parque Natural y debería estar más controlado.

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13,12 - Se alcanza el Puente de Villaseca que se eleva sobre el río, que sirve para comunicar la localidad de Villaseca con el resto de pueblo de la comarca y donde el cañón se abre para luego volverse a estrechar. Pocos metros atrás he dejado el acceso a la Cueva de los Siete Altares. A la altura de un chiringuito cerrado un ciclista prepara su bicicleta tras bajarla del coche, es un alivio encontrarse con otro loco que se atreve a rodar en un mañana tan fría por tan singular paraje.

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14,97 - Fin del "camino oficial", hay que tirar de GPS, se acabaron las señales, ahora hay que tirar para arriba por nuestra derecha por una ladera a trompicones ciclable y a otras habrá que echarse la bici a los hombros para trepar por las paredes del barranco de hasta el 13% de pendiente, paso de los 876 m. de altura a los pies del río a los 939 m. en el alto de la pared del barranco. Normalmente no me hace gracia tener que echar el pie a tierra y arrastrar la bicicleta, pero es de muy agradecer para que vuelva a circular la sangre por los pies y los dedos comiencen a responder. Conforme salgo del profundo barranco el sol comienza a acariciar este cuerpo frio, esto y la escalada hace lo necesario para volver a tonificar el cuerpo. Al borde del precipicio me meto un platanito muy rico.

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15,67 - Llego a lo alto de un estrechamiento o estrangulamiento que forma de nuevo el río, donde enlazaré con el Cº de la Molinilla que conectaba Villaseca con una ermita de Nuestra Señora de la Calleja (actualmente en ruinas) a unos pocos metros al Oeste del punto donde he llegado, en el pico que forma el brazo, por falta de tiempo no bajo a ver los restos de la iglesia de la Molinilla, lo dejo para otra ocasión.

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Un camino arenoso sembrado de cantos sigue subiendo dirección norte por la ladera, 100x100 ciclable con los pies ya recuperados. Podemos ver restos de modernos refugios de piedras para hacer vivac en esta estepa. Considerado como Puerto de 4ª Categoría de 2,5 Km. con pendiente media del 5% y un desnivel + acumulado de 150 metros.

18,35 – Cruce con el antiguo Cº de la Hoz, girando a nuestra izquierda por unos caminos que cada vez son más estructuralizado, pero esto solo será un espejismo, pronto desaparecerán bajo mis ruedas. En este punto utilizo el track que he generado a partir de antiguas cartografías, ortofotos y catastro que me permitirá acceder al MIRADOR.

18,05 – Salimos del Cº de la Hoz para conectar cerca de los restos de una taina con el Cº de la Batanera, que en la actualidad es un senda invadida por los cantos desmenuzados que siembran todo este desierto al borde de este tajo natural.

Una de estas bifurcaciones no llevarían donde se encuentran las pinturas rupestres que he mencionado en líneas anteriores pero cuya visita dejo para futuras ocasiones.

20,13 – Llega el momento de dejar la bici apoyada en los restos de una estructuras desmoronadas de piedra. Faltan 200 metros para llegar al objetivo y será más rápido llegar sin ella.

20,36 – 11:00 de la mañana, MIRADOR desde la orilla derecha del Monasterio de Ntra. Sra. de los Ángeles de la Hoz, fuera de los circuitos turísticos convencionales del Parque Natural y de los comunes de los mortales, donde hay que extremar la precaución al encontrarnos al borde del precipicio, ¡cuidado con los selfies extremos!. Desde esta perspectiva se me antoja ver la cabeza de un dragón recostado en el lecho del río, de una bestia que señalaba el inicio de la ruta.

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La visión del caudal del río es deprimente, la sequia que estamos viviendo ha reducido considerablemente la masa de agua que normalmente inunda este hachazo en la planicie segoviana, no obstante, es la visión que tenía originalmente, antes que se construyera la presa de Burgomillo, un hilo de agua, eso sí, bravía, pudiendo acceder al monasterio siguiendo el mismo cañón desde Sepúlveda. Si nos fijamos bien en la foto podemos ver los restos del puente que cruzada de una a la otra orilla.

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La ubicación del convento fue descripta por Franciscano Fray Felipe Vázquez en su obra Historia de Nuestra Señora de los Ángeles de la Hoz (Valladolid, 1786) de la siguiente forma:

"Yace un convento en una profundidad horrenda. Yace, digo, porque esta como en una lóbrega sepultura."

Según relata la obra de Fray Felipe Vázquez el monasterio contaba con

"En esa pequeña lengua de tierra que antes mencionábamos existía, según este autor, «una hermosa capilla o iglesia muy acomodada con dos naves, coro muy bueno, sacristía suficiente, hermoso camarín .../... Y para sus capellanes, pobres de solemnidad, el mismo corto espacio referido tiene una muy religiosa clausura, y convento, con todas las correspondientes oficinas, claustro alto, y bajo, tránsitos y dormitorios, y en suma no se echa de menos cosa alguna que tenga el mejor Convento de esta Santísima Provincia, y que pertenezca para la regularidad de una comunidad de Veinte y ocho religiosos, o treinta que suelen habitarle .../... Para obsequiar a los huéspedes devotos, hay también en dicho corto distrito una capacísima Casa, y plazuela, y es una admiración del ingenio, ver como en tan pequeño campo se ha hecho para todo esto lugar."

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Los cronistas franciscanos dan testimonio de que el convento fue fundado en el año 1231 por monjes de esa Orden. No se conservan documentos originales que daten su fundación ni permitan saber la historia de lugar antes de ese año. Fray Felipe Vázquez señala que la existencia de un templo primitivo que remonta a antes de la invasión de los bárbaros (a finales del imperio romano) y señala que dicho templo estaba dedicado a la Virgen y a San Pantaleón (predicador y mártir del siglo III). Se ha verificado la existencia de una comunidad de eremitas que residía, aislados unos de otros o en pequeños grupos, en las cuevas de la zona, la más relevante de estas es la cueva de los Siete Altares, gruta convertida en iglesia de origen visigótico. Este mismo monje, Fray Felipe, señala en su obra la existencia de monjes de la Orden de San Benito antes de la invasión árabe de la península. Se estima que en este mismo lugar habría alguna construcción religiosa perteneciente a los benedictinos. Se tiene constancia de que el priorato de San Frutos fue donado por los reyes al Monasterio de Silos en el año 1076 y su iglesia fue consagrada en el año 1000 lo que atestigua la presencia religiosa en el lugar. La fundación de los franciscanos esta ligada con la fundación del convento de Ayllón y Fray Bernardo de Quintaval, primer ministro provincial de esa Orden en España así como con su sucesor Fray Juan de Parente que llegó a ser General de la Orden en 1230. El 7 de septiembre de 1492, en el transcurso de una tormenta, se derrumbó el convento pero se salvó la iglesia (donde estaba rezando maitines toda la comunidad). La reina Isabel la Católica encargó las obras de reconstrucción que terminó Felipe II quien también añadió la hostelería. Isabel la Católica era ferviente devota de la Virgen de la Hoz y visitó en varias ocasiones el convento, en donde tenía alojamiento propio. Sus armas aparecen en varias estancias del convento. Felipe II lo visitó en 1565 y realizó diferentes obras que dieron como resultado la construcción de una plaza y una casa de huéspedes. Hay testimonio de esto en una inscripción que dice El católico Felipe segundo rey de las Españas vino aquí año 1565 y dio limosna para esta plazuela y para toda la obra nueva de esta casa. En 1587 crea el patronato de la iglesia por Francisco de Proaño, regidor perpetuo de la villa de Sepúlveda. Pasando después a Baltasar Gonzáles de Proaño, Caballero de la Orden de Alcántara. Con la desamortización de Mendizábal en 1835 se abandonó el convento definitivamente. La imagen de la Virgen de los Ángeles de la Hoz fue llevada a la iglesia de los Santos Justo y Pastor de Sepúlveda. Por motivo de las obras de restauración de dicho templo fue recogida por la familia Lara, descendiente de los patronos del monasterio, los Proaño. Después del abandono de los franciscanos permaneció en el convento una familia de guardas hasta mediados del siglo XX.

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Comienza un regreso que será más cómodo y veloz que la ida.

22,29 – Volvemos al cruce que habíamos dejado en el Km. 18,35 , se agradece la facilidad para rodar que proporcionaran los caminos y carreteras que vendrán a partir de ahora.

23,06 – Cruce con la Pista de Villaseca a San Frutos, por falta de tiempo omito acércame a la ermita de San Frutos, ya lo conozco y estar saturado de turistas, por lo que continuo por mi derecha en dirección a la población de Villaseca. Una pista polvorienta muy transita por la gran cantidad de turistas que se acercan al emblemático lugar de San Frutos.

24,52 – Localidad de Villaseca donde comienza el asfalto que me llevará de vuelta a Sepúlveda. Comienza un rápido descenso otra vez al fondo del barranco que forma el Duratón.

28,01 – Puente de Villaseca sobre el Duratón, que en kilómetros anteriores habíamos pasado por debajo, comenzado el Barranco del río de San Juan.

29, 32 – Uno se topa con un Puerto de 4ª Categoría hasta Villar de Sobrepeña, una subida de casi 3 Km. con una pendiente media del 5% y máximos del 8% y un desnivel + acumulado de 150 metros.

32,20 – Se llega a lo alto, al conocido como Cruz del Muerto y comienza un falso llano en dirección a Villar de Sobrepeña.

33,76 – Cruzo Villar de Sobrepeña.

36,85 – Paso junto a los restos de una antigua cantera, comenzando un rápido descenso hacia Sepúlveda, donde en la umbría hay placas de hielo.

39,29 – Alcanzo las afueras de Sepúlveda.

41,57 – Llegada al Parking a las 12:30 h., doy gracias de no haberme topado con la “bestia” y llegar a mi coche sano y salvo… A las 14:20 h. de vuelta en casa. Y como siempre digo vuelvo a casa echando en falta todos los lugares que no he podido visitar... No importa, mañana Las Hoces del Río Duratón seguirán esperándonos…

 

Que decir despues de disfrutar de tu excelente crónica de la ruta que has realizado, no se puede decir nada, es que me dejas sin palabras Gonzalo, como ya te he dicho en alguna que otra ocasión, eres un oasis entre tanta mediocreidad, yo sigo enganchado a tus crónicas, lo de las ovejas me ha dejado intrigado , saludos MAQUINA.

 

GRACIAS JoLu por tus palabras.

Misterio es algo con lo uno se encuentra y no sabe reconocer qué es. El misterio se halla, se palpa a veces, pero cuando no enfrentamos a él no hay una respuesta clara para describirlo. En este Parque Natural se barrunta un misterio primitivo, esencial y que no podemos conocer, aunque se presienta. Tal vez el esplendor de las Hoces del río Duratón nazca de su misterio, o tal vez sea al revés, y sea el esplendor natural del lugar el que de origen a su misterio. Sin duda el camino en el fondo del barranco que forma el Duratón es un “camino de perfección”, un camino de belleza y de elegancia. Uno de esos misterios es el caso de las ovejas muertas, que es uno de esos Expedientes X del que ha escrito Iker Jimenez. Un extraño caso que tuvo lugar en el vecino lugar de Valle de Tabladilla y que podrás encontrar más detalles en internet, el hecho que exista toda una iconografía en la comarca, desde capiteles hasta pinturas rupestres que muestran una "bestia", hace pensar que esta lucha contra el mal se viene produciendo en estos paramos desde tiempos inmemoriables. Por falta de tiempo no pude visitar las pinturas pero ya habrá oportunidad de volver a ciclar por este Parque Natural no lejos de Madrid.