Bueno, como quiera que este viernes nuestro amigo &re se ha tomado un merecido descanso y aprovechando el post abierto por el forero Saja-Kantabria titulado el don de la regularidad, he rescatado este otro artículo de nuestro querido amigo Xavi Fané publicado en la revista Solo-Bici en Diciembre de 99: "Entre latas de Coca-Cola blanqueadas por el ardiente sol, condones usados y trapos inidentificables, Kim y yo rodamos con brío. Entre muros caídos y sofás reventados, los dos sudamos nuestro opulento desayuno. Entre ermitas abandonadas y la terrible cicatriz de la cantera gigante, entre el marrón del suelo y el azul sucio del cielo urbano Kim y yo nos sentimos libres. Esparcidos por la maleza, viejos buscan caracoles, señoras buscan hierbas mágicas, yonquis se pinchan y parejas se aman. Cabras flacuchas mastican plácidamente la escasa vegetación que ha logrado sobrevivir a los repetidos incendios provocados. En lo más alto del monte, junto a las ciclópeas antenas metalicas, avistamos el magnánimo mediterráneo, ahora convertido en un borrón gris-azul por la densa neblina de la polución. Ahhh...respiramos profundamente y luego, de nuevo zumbando a través del lacerante matorral y sobre la deslizante arenilla del anciano océano, jugamos al viejo juego del zorro y la liebre; por unos dulces momentos podríamos estar el cualquier paraíso del mtb...hasta que, al salir de una curva, nos sacude el inconfundible hedor de la muerte. ¿Será un perro?, nos preguntamos sin la más mínima intención de indagar en la respuesta. No, no estamos aquí para integrarnos en este triste paisaje, ni para romatizar sobre sus bosques, que ya no lo son. Las montañas de verdad están lejos de aquí. El aire limpio y los rios de aguas cristalinas son una memoria borrosa, y la palabra bucólico suena a enfermedad de sistema digestivo. Estamos aquí para escapar momentáneamente de las sombra de la ciudad que quiere engullirlo todo. Estamos aquí para sentirnos libres, aunque sólo sea una ilusión. Si cierras los ojos, te tapas las orejas y te metes una brizna de tomillo bajo la nariz, todavía puedes imaginarte que estas en el cielo. En la franja marrón entre la ciudad y el campo, el mtb vive. Es un nicho improbable, áspero e inclemente...un purgatorio suspendido entre el cielo e infierno, pero para muchos es lo único que hay, o por lo menos lo único que hay entre semana. Quizás un día sepamos como guardar nuestros bosques, como detener nuestra senda de destrucción, cómo lograr un mejor equilibrio entre lo humano y lo natural. Mientras tanto, continuaremos vagando por esta tierra profanada con la brizna de tomillo bajo nuestra nariz y la sonrisa de la ilusión entre nuestros labios." Con el permiso de &re, buen finde tropa !!
Durante años leí a Xavi Fané, me encantaba lo que decía y como lo decía. No se como, un día vi en algún lugar su e-mail y le mandé un saludo diciendole que se le echaba de menos. Tubo la gentileza de contestarme y de invitarme a una ruta con él en Crested Butte si algún dia caía por ahí. Es bastante poco probable que eso suceda, pero me hizo tanta ilusión como si realmente hubiese pedaleado con él. Gracias Xavi y gracias Fantich.