Ya lo traduzco yo del inglés: La culpa es tuya, por no limitarte a meterla en una vitrina en el salón y dedicarte a contemplarla los sábados por la noche, mientras paladeas una copa de coñac, como hacemos nosotros. Mira que pretender utilizar una de nuestras bicicletas de montaña ¡EN LA MONTAÑA! ¿Pero en qué cabeza cabe? Bien merecido te lo tienes, por rebelde.
Vale, pues puedes responderles que en el país donde vives también se pueden poner límites a la irresponsabilidad en servicio post-venta y que vas a iniciar una reclamación formal y legal. Además de que los consumidores también deberemos poner límites a la hora de confiar o no en marcas que no cumplen unos mínimos de calidad y respuesta post-venta. Menudos c0j0nes tienen...