MONTAR EN BICI EN ESPAÑA (REFLEXIONES) Últimamente estoy bastante emocionado por descubrir todos los magníficos sitios para montar en bici que existen en este hermoso país que me acoge, Escocia, y no paro de hacerme pajas mentales sobre lugares, viajes y vacaciones. Principalmente, y por desgracia, por internet, ya que sin vehículo propio todo se complica bastante. Y viendo todo el abanico de excitantes posibilidades que se abre ante mis dilatadas pupilas, uno no puede dejar de comparar entre esto y lo ya conocido: mi querida España. La verdad es que, como ya he dicho antes, solamente conozco “in situ” el bikepark de Glentress, situado al sur de Escocia, en los Borders. El resto está en mi lista de cosas que hacer antes de morirme, junto a un montón de cosas más. Mis primeras impresiones allá fueron de admiración y cierta envidia por cómo aprovechan las ventajas que la naturaleza les otorga. A pesar de no tener grandes cordilleras ni sistemas montañosos, y de sufrir un clima horrendo, Escocia siempre es elegida, una y otra vez, como uno de los mejores destinos para montar en bici del mundo, si no el mejor. Y no es sólo por los magníficos paisajes y los parajes, de los que poco tenemos que envidiar en España, sino más bien por todas las facilidades que se dan para la práctica de este nuestro querido deporte. Rutas señalizadas y acotadas para ciclistas, alojamientos de todo tipo,- desde campings a hoteles de cinco estrellas- que permiten guardar la bici en la propia habitación o en un lugar seguro, cafeterías y tiendas “a pie de pista”, viajes organizados, reuniones, clubes, rutas guiadas, tracks disponibles para GPS, etc… Esta gente ha comprendido que somos algo más que “unos freaks con bicis demasiado caras”, que somos una parte importante de la industria de la hostelería y que aparte de montar en bici compramos piezas, dormimos, comemos y bebemos. No tengo cifras, pero estoy seguro de que es un buen pellizco. Por supuesto, lejos de las cantidades que deja en este país el turismo de Golf, con más experiencia, pero no deja de ser un complemento para la economía del país. Y miro hacia España y me lamento de que la situación allí sea tan diferente. Las Autoridades no dejan de poner palos en nuestras ruedas, nunca mejor dicho, y ponérnoslo cada vez más difícil. Caminos prohibidos, regulaciones y normas absurdas e incluso las primeras sanciones son el pan nuestro de cada día. En España sí somos esos frikis de bicis caras que, a sus ojos, vamos a destruir el monte. Cazadores, jinetes y senderistas nos odian. Seprona y Guardias Forestales nos persiguen. Somos los parias. Y a veces uno siente que se nos mira peor que si estuviéramos fumando porros en un banco del parque. Y mientras, multitud de empresas británicas organizan viajes de vacaciones para montar en bici en España usando los reclamos (ciertos) de buen clima y lugares increíbles para montar. Por supuesto la mayor parte de ese dinero se queda en el Reino Unido, y en España sólo se quedan unas migajas a todas luces insuficientes para crear un tejido productivo a su alrededor. Estas empresas llegan, montan, y se piran. No les importa demasiado si causan algún estrago o alguna molestia en nuestros montes porque para ellos es algo normal y más que aceptado el hacerlo. Pero pueden llegar a causar algún problema del que pagaremos el pato los que vivimos (vivís) allí. A pesar de los esfuerzos de organizaciones como IMBA, el proceso de cambio se muestra lento y proceloso. Y de todos depende poner nuestro granito de arena para revertir esta situación. O mucho me temo que yo acabaré siendo uno de esos guiris que vamos a Málaga en invierno…
El problema es que cuatro ********** hacen mas ruido que cienmil ciclistas civilizados. Que conste que pienso igual que tu, pero cuando veo a gente bajando a machete que no frenan al pasar al lado de senderistas por senderos muy estrechos, la de basura que sueltan por el monte, etc, etc, pues sientes verguenza de pertenecer a este colectivo, y quiero creer que son los menos, pero la buena fama se tarda mucho en construir y muy poco en destruir. Asi pues, mientras sigamos sumidos en la miseria cerebral que azota este pais, tendremos que pagar justos por pecadores. Por cierto, yo también he estado por esas tierras, y coincido en todo lo que dices, uno de los viajes que mas me han gustado. Eso si, al que no le guste la lluvia, que ni se lo plantee.
Hola, pienso igual que tú , el clima y la variedad de lugares por donde montar en bici en España es inmenso Hacen falta infraestructuras y muchas empresas que apuesten por el turismo de '' ruedas'' , que no solo se puede vivir del camino de Santiago y poco más El clima lo tenemos ( la envidia de media Europa) nos falta la mentalidad y los recursos ( envidiamos a media Europa) saludos y buenas rutas por Escocia Invitanos a un wiskito, aunque sea virtual , que por esa zona están tremendos