Compañeros, como sabéis este domingo nos vamos a realizar la ruta por los pinares de la Marañosa en la zona de Casa Eulogio. Os animamos desde la asociación a participar en ella, pues si sigue nevando, puede ser una de las rutas más bonitas y entretenidas de este comienzo de año. Salida 9.00 horas, llegada a Pinto 13.00 (si no pasa nada...) 50 Km Os esperamos a las 9.00 horas en la Ermita de San Antón en Pinto. (Frente al centro comercial Plaza de Eboli) Club Amigos del Mountain Bike de Pinto.
La ruta de este domingo ha sido una autentica pasada… A las 9.00 horas en la Ermita de San Antón, hacia -3 grados y aunque se nos congelaba hasta la respiración, la ruta se preveía divertida, tanto por la nieve como los bikers que estaban llegando. Cuando llego la hora de comenzar, nos dirigimos hacia la Cañada Real Galiana, para cruzar el Arroyo Culebro por el polígono de las Arenas, ya que el paso de Cueva Cuniebles, hace tiempo que esta inutilizado por la gran cantidad de agua que lleva el arroyo. Entre todos los bikers que íbamos, solo había un tipo de comentario…”esto es una pasada”, “no me lo puedo creer” , “estamos viendo algo que a lo mejor, no volvemos a ver nunca”... Era como si no estuviéramos pedaleando por Pinto, todo el suelo lleno de hilo y nieve y en los campos, mas de 10 cm. de manto blanco. Cuando llegamos a los pinos del polígono de las arenas, pudimos ver comienzo de la ruta balizada de Cabeza Fuerte y su cartel informativo, donde se explica el tipo de ruta, la fauna, la flora, y los principales elementos singulares que podemos ver a lo largo de la misma. Cuando atravesamos el polígono y salvamos el Arroyo Culebro, seguíamos sin podernos creer que estuviéramos pedaleando por nuestro municipio, sin saber que lo bueno estaba por llegar. Toda la ruta por la Cañada Real Galiana, estuvo llena de patinajes, pequeñas caídas, a causa del hielo y las rodadas que bajo la nieve quedaban ocultas a nuestros ojos. Aunque hacía bastante frió el ambiente en el grupo se iba calentando por momentos, hasta llegar el caso que el algunas paradas para esperar a los más remolones en dar pedales, se convertían en pequeños “conatos” de peleas de bolas de nieve. Cuando pasamos la depuradora de camino a Vallecas Pueblo, y sin seguir de frente, por la parte más problemática de cañada real Galiana, giramos a la derecha, por un camino que nos lleva a Rivas Vaciamadrid y a la Laguna del Campillo. Este camino es uno de los más bonitos y entretenidos de los que existen por estos “lares” así que os podéis imaginar, como fue su travesía, con la nieve y el hielo, riachuelos medio congelados, pasos de aguas, fincas llenas de nieve, sendas medio ocultas, etc, en definitiva una autentica gozada para los amantes de la aventura. En un momento dado y después de bordear un vado de agua, nos detuvimos para reagruparnos. Cuando empezaron a llegar los que venían más atrás, hubo algunos valientes, que en su vocabulario no existe la palabra “bordear” y que amablemente nos deleitaron con su manera particular de cruzar un “charco”. El primero de todos, fue Emilio…que aparte de no tener dentro de su vocabulario la palabra “bordear”, tampoco sabía que había un camino para “bordear” el charquito, por todo esto y aparte de que algunos…amiguetes le estuvimos diciendo cual era la mejor manera de pasa, el compañero, acabo escurriendo los calcetines y las botas al frió sol de la mañana, mientras que los demás, participábamos en la habitual guerra de bolas de nieve. El siguiente fue “Brainiac”, el cual nos tiene acostumbrados a sus inventos y no iba a ser menos esta vez para enseñarnos como se pasa un charco en bicicleta…aunque el charco cubra casi a las rodillas… Llegamos por fin a la Casa Eulogio, y después de un par de fotos multitudinarias por parte de Emilio, nos pusimos a subir ala parte alta de la Marañosa. El camino saliendo Casa Eulogio, más propio de Guadarrama, la Pedriza o de Somosierra que de las inmediaciones de Rivas o Arganda. La subida impresionante, muchos de nosotros, pie a tierra, no por la dureza de las rampas si no por la cantidad de nieve, y que ni siquiera andando podíamos subir, a causa de patinar con la nieve. Ya lo dijo el “Tio Santa”, …”ya que estamos aquí hay que subir al alto de la Marañosa. ”. El camino completamente blanco con más de 15 cm de nieve, que os puedo asegurar que con un trineo o con unos esquíes, habríamos tardado la mitad de tiempo en hacer el recorrido por la Marañosa. En algunos parajes, y si habéis tenido la suerte de hacer la ruta de la Horizontal en Somosierra, no se sabría decir si estábamos en un lugar o en otro, simplemente…ACOJONANTE. La bajada de la Marañosa, fue algo más aventurera, ya que por donde pensábamos bajar, estaba cerrada la puerta por los militares, por lo tanto nos tocó bajar “to pa bajo” a través de la nieve, sin preocuparnos de caminos y sendas, ya que todo el terreno estaba cubierto por el manto blanco de la nieve. Volviendo a salir al cruce de la Cañada Real Galiana con el carril bici de San Martín de la Vega y quedando poco más de 12 kilómetrios el esfuerzo de la nieve, el hielo y el barro en algunos tramos, ya se iba notando. En algunas zonas que a la ida estaban heladas, se estaban convirtiendo poco a poco en unos auténticos barrizales, los cuales había que pasar con cuidado de no irte al suelo. Al final de la ruta, cansados, sucios y sobre todo con la ilusión de haber sido de los privilegiados de poder haber hecho una ruta de alta sierra en las cercanías de Pinto y con nuestros amigos de siempre. Manu Nos vemos…en los Caminos.
Imagino las sensaciones que tuvisteis, pues yo estuve en sabado, abriendo huellas en la parte alta de la Marañosa, y fue flipante, capa de 10 a 15 cm de nieve glacé, -3º a las 2 de la tarde, me caeria una cinco veces, sobre el colchon blanco, en fin disfrutando como un niño pequeño. El domingo estuve en la casa de campo e igualmente otro flipe.
