Ruta duriza. No son muchos kilómetros pero hay alguna subida que harán las delicias de los escaladores. Como el que avisa no es traidor, sino avisador, tengo que decir que hay una subida imposible pero que nos hace abrir los ojos ante este terreno tan hermoso y caprichoso a la vez. Pasaremos por Puente Recondo, una joya de 50 metros de altura y 150 años de edad. Veremos el Castillo de las Navas del Marques con su estilizada arquitectura. La presa de Las Navas, con su caprichosa y peculiar isla. En Las Herreras podrás disfrutar de la clásica construcción serrana en mampostería de piedra. La Lastra, el embrujado despoblado lleno de misterios y rincones por descubrir. Un regalo para lo ojos y una oportunidad para nuestros gemelos.