Una gran herramienta para aficionados y profesionales De aspecto innegablemente atractivo, el Pocket PC más ambicioso de Toshiba hasta la fecha de su aparición, a mediados del 2002, posee un par de buenas razones para situarlo en la lista de los más buscados por los potenciales compradores: un procesador Intel XScale a 400 MHz, y comunicación inalámbrica Wi-Fi de red local. Esta última prestación, a ojos de un usuario profesional, le confiere unos cuantos puntos más a su favor. El e740 es el primer Pocket PC que incorpora un puerto para comunicaciones inalámbricas Wi- Fi (conocidas también como 802.11b), y uno de los primeros que llega al mundo con un procesador Intel basado en la microarquitectura XScale. Ambos elementos contribuyen a conformar uno de los Pocket PC con mejores expectativas del momento, y no son sino dos añadidos a unas notables credenciales técnicas, que el e740 comparte con la mayoría de dispositivos de su generación. Por buenas y típicas- credenciales entendemos los 64 MB de memoria RAM, así como los 32 MB de ROM; la pantalla TFT de 3,5 pulgadas y 65.536 colores, con una resolución de 240 x 320 píxeles, y la batería de ión de litio con una prometida autonomía de hasta 10 horas que, por cierto, puede reemplazarse físicamente sin tener que efectuar una disección del dispositivo destornillador en mano. Son todos ellos rasgos definitorios de un dispositivo perteneciente a la plataforma Windows CE, basado en el sistema operativo Pocket PC 2002. Una última característica, desafortunadamente poco común entre estos dispositivos, es la dualidad en el sistema de almacenamiento externo: en efecto, el e740 posee dos ranuras para tarjetas de memoria, una para SD Card y MMC; la otra para CompactFlash del Tipo II, en la que pueden insertarse también los Microdiscos de IBM no así el de 340 MB, que Toshiba contraindica para el e740.