No sé muy bien si era tristeza o el a dolor de unos ojos que no se puedían abrir. Pero, por un momento, vi el retrato del mundo en la expresión de aquel esquizofrénico. Vivir sin sentir o sentir que no vive; dos fuegos en el mismo tiempo; es el espejo helado de un mundo en el que nadie da respuesta a los ojos inmóviles de los esquizofrénicos medicados. tranxi50@yahoo.es