Escribí esto en 2005 unky ESPAÑOLATOR 3: RISE OF THE MACHINES (de afeitar) Vivimos en pleno revival ochentero y la onda del cine post-dictadura no iba a ser menos. El problema es cuando ese revival se lleva a la vida real. Alfredo Landa, Andrés Pajares, Fernando Esteso... ellos son lo ESPAÑOLATORS (españoleitors, para los más castizos). Cuando entro en una disco y me encuentro cuadrillas de españolators se me corta la digestión. Ver en pleno siglo 21 semejante catálogo de machos ibéricos 100% retro me causa poco menos que indignación: ¿moda o bloqueo mental? ¿Son así de PRO o realmente se han quedado pillaos? Es que con esto de las tendencias metrosexuales uno ya no sabe que pensar porque cada individuo la aplica a su particular modo de ver la vida (o más bien la muerte) y al final aparecen aberrantes mutaciones estéticas que parecen sacadas de una película de Antonio Ozores. No nos engañemos, el españolator no es metrosexual aunque él lo cree: es AGROSEXUAL. Si el término metrosexual viene de la palabra metrópoli, éste nuevo concepto viene de agricultura. El agrosexual es el alter-ego del metrosexual puro y duro, una especie de "cara B" de cassette de gasolinera lleno de moda prehistórica. Si nos fijamos detenidamente, las similitudes entre unos y otros son numerosas. Los dos sujetos lucen un curtido bronceado UVA, a diferencia de que los agrosexuales no lo han conseguido a base de sesiones de rayos UVA sino recogiendo UVAS en la vendimia. Es importante hacer énfasis en éste punto ya que si bien el metrosexual dedica 8 minutos al día en cuidar dicho tono de piel, el agrosexual dedica al menos 8 horas a pleno sol: de ahí ese tono rojizo apasionado, puro fuego. El españolator, igual que ustedes y yo, luce sus mejores galas cuando sale por ahí a que lo vean. Nuestros queridos españolators lucen modernas camisas de franela con cuadros estilo "leñador" entreabiertas hasta casi el ombligo y tras las cuales se puede apreciar el verdadero poder del Sansón españoLoser: LOS PELOS EN EL PECHO. No hay españolator que se precie de serlo que no tenga unos buenos pelos en el pecho y en las cejas (a veces simplemente CEJA). Éstos simpáticos personajes suelen hacer gala de su espíritu rebelde (sin causa, claramente) cuando agrupados en packs de por lo menos 4 unidades y con unos cuantos DYC encima (más que nada porque cada vez es más difícil conseguir anís chinchón en las discotecas) se sacan la camisa por fuera del pantalón al más puro estilo Bisbal y atacan a sus presas, generalmente verdaderos bombones que para colmo son conscientes de ello y van con el rollo de "no soy hija de un españolator" (mentiiiiiraaaaaaa...!!!), sin piedad alguna haciendo gala de su condición de fieras indomables ante las cuales rendirse. En algunas ocasiones podemos ver verdaderos españolators fashion de la muerte que complementan las camisas más increíbles con esos chalecos verdes de montar a caballo. ¡¡¡Sí, esos horribles chalecos recibebalas con la costura haciendo rombos!!! Como podréis imaginar, no solo de ropa y complementos vive el hombre y, por derivación lógica, el españolator. Todos éstos accesorios que como en los buenos ACTION MAN se venden por separado, no hacen otra cosa sino formar parte de un todo, de un resultado final, de una imagen global. Todo esto hay que acompañarlo de un peinado consecuentemente elegido para causar el efecto esperado: nada como peinarse a raya o engominarse el pelo a lo Mario Conde. Ya una vez totalmente preparados para una noche de acción sólo nos falta el toque final: oler bien. Colonias, que NO "odetualéts", como Brumel, Varón Dandy o cualquiera que no exceda de los 6€ es la indicada. Olvidémonos de perfumes ametrosexualizados y ciñámonos a la tradición ya que el españolator, por encima de todo es ESPAÑOL y CASTIZO, un hombre de arraigadas costumbres y sólidas convicciones sociales que pasan de padres a hijos en un halo de completo hermetismo: un chorro generoso de colonia del Eroski y a romper corazones (a base de infartos por intoxicación). Una vez en la disco, o en su defecto en el disco-bar que muchas veces también es tienda-estanco, y ya ataviados con su mejor estampa, el españolator comienza a emitir sonidos que ha ido aprendido minuciosamente en lo que es su particular Biblia del cortejo: los programas de El hombre y La Tierra. De vez en cuando alterna éste lenguaje con demostraciones de riqueza cultural al repartir a diestro y siniestro palabras selectas como "chata" ó "cordera" y con eruditos piropos albañilescos (esto sólo se da en los individuos más modernos y cosmopolitas) como "que no me entere yo que ese culito pasa hambre", "quién fuese albañil (que ya lo soy) pa´ taparte la raja" ó el clásico entre los clásicos "eso es carne y no lo que echa mi madre al cocido", porque aunque ya tiene más de 35 años sigue viviendo con ella. En definitiva, queridos lectores, en España no estamos viviendo un revival estético sino un réquiem masculino en toda regla y no lo voy a negar: por mucho Calvin Klein, mucho Armani y mucho maquillaje social que usemos, todos tenemos un españolator dentro y es que esto no es JOLIBUT...
Pues la verdad que si todos tenemos un Españolator dentro, y a quien no le llama la atencion una chica guapa.......... siendo heterosexual
Me se están pitando los oídos... Mon parfum prèfère est l´Eau de Poitrine de Chèvre. Traducción fina de Google Cagontó