El otro día escuchaba por la radio un análisis a las estadísticas de accidentalidad de la DGT, y si digeron una serie de datos inquietantes que he querido comprobar en la web de dicha página y la verdad es que tiran por tierra todos los triunfalismos de la DGT. La DGT se felicita por su labor y por la efectividad del carnet por puntos hablándonos de las personas que han muerto menos que el año pasado en nuestras carreteras. Viendo en la web de la propia DGT, se puede ver la evolución de la mortalidad en carreteras a lo largo del tiempo. http://www.dgt.es/dgt_informa/obser...olucion_victimas_mortales_carretera.htm#anual No me gusta hablar de las personas como simples números pero efectivamente, el 2006 finalizó con 272 muertos menos que el año anterior. Es un número importante de personas, pero si miramos la evolución de mortalidad a lo largo de los años, vemos como este descenso de mortalidad no ha destacado respecto a los de otros años anteriores en los que no había carnet por puntos. Del 91 al 92 la mortalidad descendió en 665 personas, del 92 al 93 la mortalidad descendió en 382 personas, y del 93 al 94 se redujo en 627. Curiosamente, por esa época todos los coches que se vendían comenzaban a llevar cinturones de seguridad traseros, aparecían los primeros airbag, y se empezaba a hacer común el uso del ABS. Del 2003 al 2004 también hay un gran bajón de accidentalidad, año en el que se multiplican los coches que llevan múltiples airbags y controles de estabilidad. Son sólo especulaciones pero me atrevo a decir que los descensos de la mortalidad están relacionados en un elevado porcentaje (un 70-80% tal vez) al incremento de seguridad de los vehículos. Es más fácil matarse con un Renault 11 a 120km/h que con un Golf a 150km/h, con la diferencia de que hace 20 años era legal, igual que ahora, circular a 120km/h por autopista con un renault 11 o con un Seat 127 (velocidad a la cual despegaba), y hoy sigue estando prohibido ir a 140km/h con coches como un Audi a4. Lo que más ha influído el carnet por puntos en la manera de conducir es en la velocidad, que es en lo que se centran y obsesionan los controles policiales por ser lo más fácil de detectar y multar, mientras que las causas más importantes de accidentalidad (ésto no viene en esta web) son las distracciones y los adelantamientos indebidos (ante los cuales los controles policiales son muy ineficaces).
Lo que resulta penoso es que después de tantos y tantos años y tantos y tantos muertos las únicas maneras que se conocen para reducir la mortalidad y que funcionan son: * Mejora de las carreteras: si es una carretera con calzadas de sentido único es más ****** el choque frontal, aunque algunos desafían las leyes de la física y lo logran * Mejora en la seguridad de los vehículos: es decir, dar una segunda oportunidad a quien quizás no la mereciera * Atacar al bolsillo del sujeto: una persona que puede verse multada o con puntos menos en el carnet levanta el pie, pero casi nadie levanta el pie por prudencia. Resulta un claro fracaso de la educación sobre valores tan básicos como la prudencia y el respeto a los derechos del prójimo, entre los cuales se encuentra la seguridad y la vida. Tampoco hay que descartar un factor en la reducción de la mortalidad: la mayoría de los que se matan en carretera se lo están buscando, y quizás cada año se matan más de los imprudentes de su mismo nivel que pasan a conducir vehículos. Porque en torno a 50.000 fallecidos en 10 años es un número que lo piensas friamente y acojona, pero parece ser mucho más importante que de una partida de chupetes uno entre mil pueda irritar la lengua a un niño que tener varios miles de muertos y parapléjicos al año por simples imprudencias.
Para mí, sólo hay tres premisas para controlar esto: EDUCACIÓN, EDUCACIÓN Y PENAS DURAS PARA LOS INFRACTORES. Cumpliendo las dos primeras no hace falta recurrir a la tercera; sin cumplir las dos primeras se llega a la tercera; y la situación actual es que faltan las tres......consecuencia los miles de fallecidos. Saludos.
