Pues nada, simplemente decir que sois bibliotecas andantes y que efectivamente son Van der Velde, de Jong y Breukink en la famosa y dramática etapa del Gavia. De la moza no se quien es, pero tiene buenas gambas.
Aqui todo un campeon del mundo, de una disciplina que ya no existe, y fue PRO casi con 60 años, ah y español Quien es?
Siseñor, D. Guillermo Timoner, que depues de un parentesis del 68 al 81, volvio con el equipo Teka con un zurron de años
Ahi va mi aportacion, que carrera es?. Muy facil. Y que 4 ciclistas son lo que se ven. Yo identifico a 2, ambos muy faciles y uno aun en activo.
mussewu, hincapie, el coast que tira puede ser Lars Michaelsen?????y el de atras ni idea,pero me tiro ala piscina a ver si hay agua Max Van Heeswijk, carrera la paris roubaix
NO ES ESA CARRERA!! es el Infierno del Norte, sobran las palabras. por los pros.... vale el comodin de la llmada?
Creo son Jose Luis Talamillo y Mendijur que fueron campeón y subcampeón en el 65, y que por desgracia fallecieron los 2 ese mismo año. El primero atropellado entrenando y el segundo por caida en una prueba.
Excelente!, muy bien Pedro. Son Talamllo y Mendijur 1965: EL AÑO NEGRO DEL CICLO-CROSS La última vuelta de Talamillo y Mendijur, por Max Bulla En la localidad guipuzcoana de Bergara disputaban la segunda y definitiva etapa del prestigioso Premio Pentecostés los mejores independientes y aficionados del calendario vasco. Se habían lanzado hacia adelante Amelio Mendijur (Kas), Adrián Diez (Cervezas Oro y Norte) y Félix Gonzalez (Fagor), éste en tarea de control para el líder Ochotorena. Se encuentran bajando el alto de Izaga con todavía casi 70 kilómetros a meta. Y aparece un coche que sube; no les da tiempo a reaccionar y chocan. El más perjudicado es Mendijur, que se empotra literalmente en el vehículo, precisamente en un tramo que conoce como la palma de su mano, a tiro de piedra de la localidad en la que vive desde hace unos años, Urretxu. Fallece en el acto. Sus dos compañeros de aventura, hospitalizados. Era Mendijur un chaval de 21 años que venía para figura de la modalidad ciclo-pedestre. Ya en 1964, aficionado todavía, se había impuesto en el campeonato de España a corredores, profesionales algunos, de mucho mayor nombre y palmarés. Fue la victoria que le consagró como sucesor de Barrutia y Talamillo. Y pocos meses antes de su muerte, en el campeonato del mundo de la máxima categoría coló su apellido en el quinto puesto de la clasificación, tras la estela de los máximos dominadores Renato Longo y Rolf Wolfshohl. Toda una densa vida deportiva por delante, que cortó de cuajo un incontrolado automóvil aquel martes 8 de junio. Sus amigos dieron el nombre de Amelio a la prueba de Urretxu del domingo 12 de diciembre, en la que triunfó un corredor ya veterano -32 años- que venía dominando el panorama de la bici al hombro durante largos años, el burgalés Jose Luis Talamillo que, tras haber desaparecido su equipo Olsa tras única temporada en la élite, optó por el maillot de Zeus-Karpy para los embarrados circuitos invernales. Tenía en su haber para entonces seis campeonatos de España casi consecutivos (1958, 59, 60, 62, 63, 65). Esprinter de los buenos, llevaba cosechadas 25 victorias en el campo profesional de ruta. Ganador absoluto de la Setmana 65, líder en la Vuelta a España 61, consiguió terminar el Giro 64. Obligado, como tantos otros, a la constante danza por equipos que poco tenían de escuadras, se hizo con un merecido nombre entre los aficionados. Al domingo siguiente volvió a vencer en Mondragón, carrera en que se jugaba el título guipuzcoano que consiguió Pablo Arsuaga. Y en la siguiente cita dominical fue batido por Antón Barrutia, de su misma quinta y máximo enemigo con la bicicleta al hombro y también en los últimos metros de las pruebas en ruta. Declaró José Luis tras la carrera que no le importaba el triunfo del de Iurreta, incluso se alegraba por el bueno de Antón, y que lo más importante era que ambos estuvieran en óptimo momento para el cercano mundial a celebrar en Beasain a finales de febrero, donde tenía puestas todas sus esperanzas. Dicho de paso, tercer mundial de ciclo-cross en Gipuzkoa (Oñati 1953, Tolosa 1960) que demostraba una vez más su altísimo nivel en organizaciones ciclistas. No olvidemos que en este fatal año de 1965 se corrieron entre el circuito de Lasarte y el estrenado velódromo de Anoeta aun sin cubrir los campeonatos del mundo de ciclismo en ruta y pista. Entrenar duro laborables y festivos. Alrededor de casa. Es lo que hizo por última vez Tala el día de Nochevieja. Porque cuando regresaba al mediodía, a unos 8 kilómetros de Burgos -carretera de Logroño- en una recta un vehículo le golpeó por detrás, lo arrastró unos 25 metros por el áspero asfalto y nos lo llevó para siempre. Ni el veterano ni la promesa pudieron estar en un mundial que con tanto mimo estaban preparando, y donde se impuso contra todo pronóstico un joven de 20 años -Eric de Vlaeminck-, que daba comienzo así a su particular y extenso mandato en el ciclo-cross mundial. Dos exponentes de un ciclismo donde, a la caza de un jornal poco más que digno, los picos de forma obligaban a pedalear tanto en diciembre como en verano, en un peregrinar de maillots, inestables la mayoría, de color a ciclismo pálido todavía. Qué lejos quedan Gamma, Lube, Boxing, Majestad o Catigene -por citar algunos- que vistieron a una generación puente de ciclistas, claves para el salto definitivo del pelotón español al ciclismo moderno. Se fueron dramáticamente dando pedales, pero siguen en el grupo de cabeza; Talamillo da nombre a un polideportivo de Burgos, inaugurado en el año 2001, y el Memorial Mendijur convoca todos los años a los cadetes en Urretxu, XXVI edición en 2008.
El cuarto en la página anterior no es Max Van Heeswijk, es Fred Rodriguez. Los otros tres sí que son Michaelsen, Museeuw e Hincapie. Un saludo
comelasaña, lo as bordado, aun recuerdo el accidente de Mendijur y la placa conmemorativa en la bajada de Izaga. En ese momento el director del Kas era Antón Barrutia.
Ese 127, ¡que puntazo! Y encima amarillo. Y el maillot del Super Ser, ¡quién lo pilllara! Hasta luego.