Buenas a todos. Me acabo de leer las 4 páginas de este post y hay una cosa con la que me he quedado flipando: Los residuos. La verdad es uqe leyendo vuestros comentarios y la forma en la que los exponéis he llegado a pensar que camináis entre los papeles de las pajitas y los manteles y teniendo cuidado de no pisar los charcos de Coca-Cola y los pepinillos de las hamburguesas. No sé cómo será en donde vivís vosotros, pero yo vivo en Gran Canaria y aquí en mi vida he visto tanta ****** como decís que hay. Sí es cierto que siempre hay alguien que deja la bandeja (yo soy el primero, a mí nadie me cuenta historias sobre ser buena persona y recogerla, ése es su trabajo y en ningún restaurante te piden que lleves la bandeja a la papelera, pero éste es otro tema), pero ya está, no sé si aquí será diferente o cómo será pero creo que hay mucho prejuicio por el tema de ser comida rápida, y me gustaría destacar algo que ya se ha dicho varias veces: El McDonald y el "Burrikin" provocan obesidad si váis a comer todos los días, por ir una vez al mes o incluso una vez a la semana no corréis ningún peligro, y si estáis preocupados por los niños, sabed que más daños les hacen los paquetes de papas, los bollos y las golosinas que se compran en el recreo casi a diario. Bueno ésta es mi opinión y espero que nadie se sienta ofendido. Saludos a todos y feliz año nuevo!!
Tienes mucha razón con lo que has remarcado en negrita. La bollería industrial es lo peor y los padres, en general, no le dan tanta importancia.
Es que claro, mucha gente no cae en eso, pero si os paráis a pensar, hace más daño un paquete de papas o un donut que una hamburguesa del McDonald, del Burriking, o un Kebab. El problema está en que tenemos en nuestro concepto de comida rápida, que siempre hemos escuchado que es muy mala, que engorda, que la carne es de rata, etc. etc., pero nada más lejos de la realidad.
Diosss yo adoro la comida rapida , ahora estoi flipao por que han puesto un taco bell en mi ciudad , pero claro ya le doy un uso moderado que hay que mantener la linea